Los máximos responsables de los servicios secretos británicos han garantizado que todas sus operaciones se ejecutan en el marco de la legalidad, durante una comparecencia esta tarde ante la Cámara de los Comunes que, de forma inédita, ha sido televisada al país. Los respectivos directores del centro de escuchas del espionaje británico (GCHQ) y de los servicios de inteligencia nacional (MI5) y exterior (MI6) respondían de este modo a la divulgación de los informes secretos filtrados por Edward Snowden sobre su práctica sistemática de interceptar las comunicaciones de millones de ciudadanos a través del programa estadounidense Prisma.

La publicación de esos documentos por medios como The Guardian “ha sido muy dañina y ha puesto en peligro nuestra seguridad”, subrayó el responsable de MI6, John Sawers, ante las preguntas del comité de inteligencia del Parlamento. Tanto él como su colega del MI6, Andrew Parker, que en su día calificó las filtraciones de Snowden de “regalo para los terroristas”, rehusaron detallar públicamente ejemplos concretos que sostuvieran sus afirmaciones. El presidente del comité, el ex ministro conservador sir Malcom Rifkind, ya había advertido previamente que, dado su carácter público, la audiencia excluiría cualquier detalle sobre las capacidades técnicas de los servicios secretos y sobre las operaciones en curso. Para preservar ese secretismo, la sesión fue retransmitida con dos minutos de retraso sobre su tiempo real, y a los periodistas presentes en la sala se les prohibió el uso de sus teléfonos móviles.

Los datos aportados por el ex analista estadounidense –que vive asilado en Rusia- no sólo sugieren que el GCHQ había accedido al programa Prisma orillando la ley británica en la materia, sino también que los servicios secretos británicos colaboraron con sus homólogos de la otra orilla del Atlántico (La Agencia Nacional de Seguridad) en el espionaje de varios líderes mundiales. El comité de inteligencia del Parlamento, presidido por el ex ministro conservador sir Malcom Rifkind e integrado por diputados de todos los partidos y dos miembros de la Cámara de los Lores, ya exoneró el pasado julio a los servicios secretos de haber incurrido en la ilegalidad. Los diputados decidieron, si embargo, entonces examinar si la actual legislación que regula el acceso a las comunicaciones “sigue siendo adecuado” en la era digital, razón por la que se ha convocado la sesión de hoy.

La justificación brindada por los tres hombres, por tanto, apuntaba principalmente a la opinión pública. “No pasamos el tiempo escrutando las comunicaciones de internet y telefónicas del grueso de los ciudadanos, sino que nos centramos en aquéllas sobre las que hay sospecha de que sean una amenaza”, ha subrayado el jefe del GCHQ, Iain Lobban. ¿Por qué ocultaron entonces esa práctica al público británico?, le fue inquirido. “´Secreto´no es sinónimo de ´siniestro´, se limitó a contestar.

Los tres interpelados reconocieron que internet representa el mayor desafío para sus agencias, en cuanto los terroristas lo utilizan como arma, y por ello defendieron como imperativa la cooperación con los servicios secretos de otros países, especialmente de sus aliados europeos y de EE.UU. El trabajo de los espías, recalcaron, justifica el gasto anual de 200.000 millones de libras para ese apartado, que constituye el 6% del presupuesto de defensa nacional. Un dispendio que, concluyeron, el constribuyente puede considerar “proporcionado”.

Tomado de EL PAÍS; ESPAÑA

Dos periodistas de Radio France International, Ghislaine Dupont y Claude Verlon, han sido asesinados este sábado en Kidal (norte de Malí) por un grupo de cuatro hombres armados que minutos antes los había secuestrado. Los cadáveres de los dos periodistas han sido encontrados a primera hora de esta tarde a unos 12 kilómetros de la ciudad y, por el momento, se desconoce la identidad de los asesinos. Dupont y Verlon fueron secuestrados justo después de realizar una entrevista a un alto responsable del Movimiento Nacional de Liberación del Azawad (MNLA).

Ghislaine Dupont y Claude Verlon se habían desplazado hasta la región de Kidal, en el norte de Malí, en calidad de enviados especiales de la cadena pública Radio France International. Según diversas fuentes, ambos se encontraban esta mañana realizando una entrevista a Ambeiry Ag Ghissa, un alto responsable del MNLA, en su domicilio de Kidal y fue sobre las 13.00 horas, saliendo de la casa al finalizar dicha entrevista, cuando fueron abordados por cuatro hombres armados, que los subieron a la fuerza en un todoterreno que salió a toda velocidad de la ciudad.

Ambos cuerpos fueron encontrados pocos minutos después en un punto situado a unos 12 kilómetros al este de Kidal, con numerosos impactos de bala. Según distintas fuentes, los cadáveres fueron localizados por soldados franceses de la operación Serval estacionados en Kidal, que iniciaron una búsqueda en helicóptero nada más tener conocimiento del secuestro. Los periodistas estaban preparando un especial sobre el conflicto de Malí que estaba previsto emitir los próximos 7 y 8 de noviembre.

Claude Verlon, el periodista de Radio France Internationale asesinado en Malí.

Esta doble muerte viene a poner sobre la mesa que, pese a la mejora de la situación general, el conflicto de Malí, que se inició en enero de 2012 con el estallido de la rebelión tuareg en el norte del país, está lejos de haber terminado y presenta aún enormes riesgos para la seguridad. Especialmente tensa es la situación en Kidal, donde los rebeldes del MNLA, con el beneplácito de las fuerzas militares francesas, se han hecho fuertes.

Precisamente este viernes habían comenzado en Bamako, con el impulso personal del presidente maliense Ibrahim Boubacar Keita, las conversaciones entre distintas comunidades de la región del norte del país para alcanzar acuerdos mínimos de convivencia después del conflicto que en los últimos 22 meses ha enfrentado a distintos grupos armados, como el propio MNLA o los terroristas de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) y Muyao, y los ejércitos de Malí, Francia y varios países africanos.

Tomado de EL PAÍS; ESPAÑA