Los ministros de Defensa de ambos países anunciaron el inicio de un proceso de asociación entre sus entidades militares. Lo propondrán a los miembros de la Unasur

El plan fue anunciado por los ministros de Defensa de Brasil, Celso Amorim, y de Colombia, Juan Carlos Pinzón, tras un encuentro en Brasilia. El programa incluiría la participación de Colombia en el desarrollo del avión de transporte militar KC-390, que proyecta Brasil, y la compra por parte de este país de un número no determinado de lanchas rápidas fluviales de origen colombiano.

Esas lanchas, explicó Pinzón, podrían ser fabricadas después en forma conjunta, para "poner a disposición" de Brasil y de toda la región "la tecnología" que Colombia ha desarrollado en el segmento.

Además de esos dos "proyectos específicos", como los definió el colombiano, también acordaron explorar la posibilidad de desarrollar en forma conjunta aviones no tripulados, que servirían para reforzar las tareas de vigilancia en todas las fronteras sudamericanas.

Según Amorim, ese inicio de integración entre Brasil y Colombia en materia de industria de defensa deberá ampliarse luego a toda la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), bloque en el que recordó que "ya se discute la integración de las cadenas productivas" en diversas áreas, salvo en la relativa a armamentos y equipamientos militares.

El ministro brasileño explicó que en la Unasur ya se ha creado "un espacio de defensa" y un consejo específico para ese sector, pero sostuvo que se debe "avanzar más" en esa dirección y "ampliar ese espacio a las industrias" armamentísticas.

Amorim y Pinzón también anunciaron que han decidido crear una comisión bilateral en materia de defensa, que centrará su trabajo en asuntos de seguridad en los cerca de 1.600 kilómetros de frontera común y sostendrá su primera reunión en las próximas semanas.

"Queremos crear un centro integrado en la lucha contra el crimen trasnacional, para impedir la movilidad de los grupos ilegales" por la frontera, dijo Pinzón, que agregó que ese modelo también podría servir para crear una "agenda común" sobre este tema en la Unasur.