La relación con Cuba fue abordada por el Presidente. Aseguró que la política de facilitar el envío de remesas y de viajes de los cubanoestadounidenses a la isla comunista se mantendrá, a pesar de reveses en la relación bilateral, como el encarcelamiento del estadounidense Alan Gross.

"El gobierno cubano no ha dado evidencias de que sean suficientemente agresivos a la hora de cambiar sus políticas económicas, y ciertamente no han sido suficientemente agresivos para liberar a los prisioneros políticos y dejar que la gente diga lo que piensa", dijo. "Cuando pensamos en los cambios enormes que hemos visto en los últimos seis meses en Oriente Medio, prácticamente no quedan países autoritarios comunistas en el mundo, y aquí está esta pequeña isla que es un retorno a los años sesenta", añadió.

Entrevistado por corresponsales hispanos, el Presidente de los EEUU se refirió, entre otros temas, a los TLC con Colombia y Panamá y a la votación en la ONU de un Estado palestino

"Creo que vamos a lograr la aprobación (de los tratados de libre comercio) con Colombia, Panamá y Corea del Sur", confió Barack Obama durante la ronda de preguntas al señalar que dichas iniciativas tienen apoyo suficiente en el Congreso.

Los TLC, pendientes desde el anterior gobierno de Geogre W. Bush, han quedado envueltos en las tensiones internas de demócratas y republicanos, aunque ambos partidos se han manifestado a favor de la medida. Este lunes, el representante de Comercio Exterior de los Estados Unidos, Ron Kirk, se manifestó "optimista" de que sean aprobados antes de noviembre.

Otro de los temas a los que se refirió el mandatario fue la probable votación en Naciones Unidas para la creación de un Estado palestino. Según Obama, la iniciativa sería una distracción en el camino para lograr la paz con Israel. Añadió, no obstante, que en el caso de que resulte aprobada, Israel "se haría daño a sí mismo", si toma represalias económicas contra la Autoridad Palestina. "Lo que vaya a suceder en Nueva York puede llamar mucho la atención de la prensa, pero no va a cambiar en el fondo lo que está pasando en el terreno", explicó tras reiterar que su país se opondrá firmemente a la votación.

Obama también hizo alusión a la violencia que azota México al destacar la estrategia contra el crimen organizado que adoptó el presidente Felipe Calderón. "Creo que está haciendo lo correcto al enfrentarse a los narcotraficantes", señaló.

"El presidente Calderón comprende, y está totalmente en lo cierto, cuando dice que constituye una influencia corrosiva y corruptora en cualquier economía o sociedad cuando los criminales son capaces de controlar grandes segmentos de la economía y, como consecuencia, se presentan como tejido social de los países", manifestó. "Y no creo que los mexicanos quieran vivir en una sociedad donde los narcotraficantes son considerados los individuos más poderosos de la sociedad", agregó.

Calderón "ha tomado una decisión, y es una decisión con la que estoy de acuerdo y que respeto, de que si se compra la paz llegando a un acuerdo sin moral y sin respeto por la vida humana, eso no es bueno para una sociedad", continuó el mandatario. "Así que respeto su valor y creo que por muy difícil que sean estos momentos, en último término, México será más fuerte si no cede ante este tipo de redes transnacionales", afirmó.

Por otra parte, Obama pronosticó que la economía mundial seguirá débil, mientras la crisis del euro no se resuelva. La falta de unanimidad en la eurozona no ayuda a hallar una solución a la crisis, dijo. Por esa razón, destacó que sus líderes deberán "tomar una decisión acerca de cómo conjuntar la integración monetaria con un grupo más efectivo de políticas fiscales coordinadas".