Más de 70 mil alumnos secundarios y universitarios, acompañados por profesores, protestaron para exigir mejoras en la educación pública. Un grupo de encapuchados arrojó bombas molotov contra la policía

En medio de la crisis que afronta el gobierno de Sebastián Piñera, 70 mil personas, según los organizadores, se movilizaron por el centro de Santiago en una nueva muestra de descontento por la política educativa. "Estamos ante un diálogo de sordos", señaló Camila Vallejo, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile.

La marcha se desarrollaba de manera pacífica y era resguardada por un importante operativo de las Fuerzas Especiales de Carabineros, especialmente frente a La Moneda, hasta que un grupo de encapuchados comenzó a lanzar bombas molotov y piedras contra los efectivos.

También realizaron barricadas utilizando las vallas dispuestas en el lugar. La policía, a su vez, activó dos carros lanzaaguas y lanzó bombas lacrimógenas para dispersar a los manifestantes.

El titular del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, indicó que es imperioso abrir negociaciones con el ministro de Educación, Joaquín Lavín. "Queremos formar una mesa de diálogo pero con garantías, queremos señales claras de que se accederá a ciertas demandas", insistió.

Según algunos sondeos, sólo el 60% de los jóvenes menores de 24 años egresa del colegio en los sectores pobres. Mientras que esa cifra llega al 97% entre la población más rica del país.

Las estadísticas oficiales registraron que sólo uno de cada seis jóvenes humildes llega a la educación superior, mientras que la relación sube a seis de diez en los hogares más pudientes.

La protesta de estudiantes también se replicó esta jornada en diferentes ciudades, como Valparaíso, Concepción, Temuco, Valdivia, Arica, San Antonio, Chillán, por lo que logró reunir a miles de personas.