Abandonaron la discusión por un aumento salarial. Piden un sueldo mínimo diez veces superior al actual. El gobierno concedió una suba superior a la inflación, que es del 7%

Con esta reunión, el gobierno y la Central Obrara Boliviana, que nuclea a todos los sindicatos y hasta hace poco era una de las principales aliadas del presidente Evo Morales, reanudaron el frustrado diálogo de la semana pasada, que terminó con una huelga de 24 horas de escaso seguimiento. En esa ocasión, el mandatario se había negado a discutir aumentos salariales superiores al alza de precios, que durante 2010 fue de 7,8%.

Pese a que este lunes el ministro de Trabajo, Félix Rojas, afirmó que el incremento salarial para esta gestión será superior a dicha tasa de inflación, tampoco hubo acuerdo, "porque los trabajadores piden un incremento de 1.022%", según opinó el funcionario. La suba de 96 dólares a 1.183 dólares para un trabajador con una familia de cinco personas fue calificada por Morales como "descabellada" e "irracional".

El aumento también está lejos de las medias salariales, que, por ejemplo, para los médicos del Estado están entre 270 y 568 dólares, mientras que los maestros ganan entre 170 y 312 dólares, según los sindicatos.

"La Central Obrera Boliviana (COB) ha hecho conocer su propuesta y planteamos que esta propuesta sea compatibilizada con datos del instituto de estadísticas, pero después de dos horas y media de tratar ese punto lamentablemente los dirigentes se han levantado y abandonaron la reunión", indicó Rojas.

De su lado, este martes, la COB realizará una asamblea nacional para analizar las propuestas del Ejecutivo, según anunció antes de la reunión el secretario del la central, Pedro Montes.

Bolivia, uno de los países más pobres de Latinoamérica, sufre una escasez de alimentos y una fuerte subida de precios de los principales alimentos, que para Morales se debe a la especulación y al cambio climático.