El Gobierno de Nicolás Maduro ha enviado a Cuba un 13% menos de crudo y otros combustibles durante el primer semestre de 2017, en comparación con el mismo periodo del año pasado, según datos de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) obtenidos por la agencia Reuters.

"El grueso de la reducción de los envíos de 2017 se concentró en el petróleo destinado a las refinerías cubanas, que declinó en un 21% a 42.310 barriles por día según los documentos", se informa en la nota.

Según la agencia, hasta el año pasado PDVSA había paliado el descenso de envíos de crudo a Cuba (aliado ideológico de Venezuela) con un aumento en el suministro de productos refinados, pero según estos nuevos documentos los combustibles de origen venezolano que la Isla ha recibido a lo largo de este año casi no han variado, situándose actualmente en 30.040 barriles diarios.

Según la agencia, hasta el año pasado PDVSA había paliado el descenso de envíos de crudo a Cuba (aliado ideológico de Venezuela) con un aumento en el suministro de productos refinados

En el mejor momento de los acuerdos bilaterales entre Cuba y Venezuela, en 2008, la Isla recibía unos 115.000 barriles de crudo al día a precios subsidiados, y que las autoridades cubanas pagaban con servicios sanitarios a través del envío de misiones médicas al país latinoamericano. Pero debido a la crisis política y económica en Venezuela esa cantidad se ha reducido a 72.350 barriles diarios.

Desde entonces, las autoridades cubanas han encontrado en Rusia a un nuevo suministrador de combustible, algo que según Reuters no se producía desde hacía más de una década. El pasado 9 de julio arribó al puerto de La Habana el petrolero Ocean Quest cargado con petróleo ruso y que está a la espera de ser descargado.

Aún así, la llegada de petróleo procedente de Rusia no supone una solución definitiva para el Gobierno de la Isla. "La economía cubana entró en recesión el año pasado por primera vez desde la caída de la Unión Soviética, en medio de una contracción de los ingresos por exportaciones que ha dejado a Cuba con fondos insuficientes para reemplazar el declinante suministro de petróleo venezolano con otras importaciones", sentencia Reuters.

En julio de 2016, el presidente cubano Raúl Castro admitió que la reducción en los suministros de combustible venezolano a la Isla había provocado "tensiones adicionales en el funcionamiento de la economía cubana".

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