La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, dijo que el colectivo femenino “continuará” luchando más fuerte que nunca por la libertad incondicional de los presos políticos cubanos y los derechos humanos a pesar del aumento de la represión y las detenciones temporales.

Juan Carlos Chavez

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“Nosotras somos mujeres que estamos conscientes sobre nuestra lucha pacífica contra la injusticia y las libertades. Si nos tiran al piso, vamos a levantarnos”, dijo Soler en una entrevista telefónica a El Nuevo Herald desde su casa en La Habana. “No importa cuántas veces sea necesario”.

Las Damas de Blanco surgieron al calor de la Primavera Negra del 2003, una oleada represiva contra líderes del movimiento disidente y activistas de derechos humanos, periodistas y bibliotecarios independientes.

Las mujeres, identificadas por su habitual vestimenta blanca, transformaron la escena opositora callejera. Desde su aparición han sufrido constantes actos de hostigamientos y ataques de fuerzas progubernamentales.

Todos los domingos asisten a una misa en la Iglesia de Santa Rita, en el barrio de Miramar. Luego marchan pacíficamente con gladiolos en las manos por la Quinta Avenida. Es el único grupo opositor medianamente tolerado por el gobierno en las calles de la isla.

Sin embargo Soler explicó que Las Damas de Blanco se han estado quejando de medidas cada vez más violentas por parte de simpatizantes del gobierno de los hermanos Castro y agentes de la inteligencia cubana contra sus planes de escenificar protestas callejeras.

“Este año hemos contabilizado más de 20 actos de repudio y cientos de detenciones que han durado algunas horas o días. Hoy martes, por ejemplo, la policía detuvo a 11 mujeres que iban a participar en nuestro té literario”, dijo Soler.

El llamado “té literario” es una reunión donde las mujeres analizan asuntos de interés y discuten diferentes iniciativas, entre otros.

Soler agregó que en un intento por dificultar las actividades del grupo, el gobierno cubano ordenó a comienzos de la semana pasada el arresto de al menos 30 miembros y simpatizantes del colectivo. El propósito era evitar que participaran en una manifestación de apoyo por el Día Internacional de los Derechos Humanos, añadió Soler.

“No importa, no tenemos miedo. Vamos a seguir creciendo en todo el país”, puntualizó Soler.

En un país cuyo régimen no ha mejorado su historial de libertades individuales y prefiere apostar por aumentar drásticamente las detenciones y los operativos de vigilancia para silenciar al pacífico movimiento opositor, la permanencia de las Damas de Blanco se ha mantenido sobre los masivos arrestos de sus integrantes.

En noviembre del año pasado Las Damas de Blanco acordaron renombrar al grupo como Las Damas de Blanco Laura Pollán en honor a su fundadora, fallecida el 14 de octubre del 2011.

La dedicación y valentía del colectivo han sido reconocidas internacionalmente. En 2005 recibieron el Premio Sajarov del Parlamento Europeo y el Galardón por los Derechos Humanos 2010 del Departamento de Estado. En octubre de ese año también se le concedió el Premio a la Libertad del Consejo del Atlántico de la OTAN, con sede en Bruselas.