El presidente ecuatoriano estimó que serviría para evitar el contrabando y el crimen, y criticó con dureza las recetas que defienden los EEUU. Una vez más, volvió a atacar a la prensa

Los medios de comunicación se han convertido, en el último tiempo, en el enemigo favorito de Rafael Correa. El trabajo de la prensa se cuela en casi todas sus intervenciones, sean entrevistas o discursos públicos. Y el reportaje que la agencia AFP le hizo este lunes cuando arribó a Bolivia con motivo de la 42ª asamblea de la Organización de los Estados Americanos (OEA) no fue la excepción.

El mandatario no ahorró en críticas contra los medios privados de la región, aunque en esta oportunidad destacó que, a su juicio, no todos son iguales. Consideró que también existen los que realizan su labor con responsabilidad y seriedad, y entre ellos remarcó Ecuador TV -"uno de los mejores canales de toda América Latina"- y el diario El Telégrafo -"con calidad y contenidos extraordinarios"-.

El gobernante ecuatoriano, quien recibe cotidianamente cuestionamientos por parte de organismos internacionales de prensa, subrayó que los medios "anglosajones son mejores" porque priorizan "la verdad", respecto a los latinoamericanos, que "son particularmente malos y vinculados a los grupos de poder".

Si la postura de Correa contra la prensa no sorprendió a sus seguidores, seguramente sí los hayan movilizado sus declaraciones en torno al combate contra las drogas. Y es que el mandatario decidió mantenerse en un cauto silencio durante el debate sobre una posible despenalización que precedió a la última Cumbre de las Américas.

El ecuatoriano manifestó su apoyo "parcial" a la legalización de algunas drogas. Defendió su postura recordando lo que ocurrió en los Estados Unidos en la década del 30 cuando se eliminó la prohibición sobre el consumo de alcohol para evitar los oscuros negocios que estaban detrás de su tráfico.

"Tener ciertas dosis (de consumo personal), con calidad, poner control sanitario, poner impuestos, es análogo a lo que pasó en los Estados Unidos" con la eliminación de la llamada Ley Seca, explicó.

El presidente calificó la lucha internacional antidrogas como un fracaso y apuntó contra los Estados Unidos. Dijo que la falta de resultados es responsabilidad de Washington debido a su influencia en la elaboración de políticas de lucha contra la producción de drogas en América Latina.

Pero también admitió culpas propias al referirse a los gobiernos latinoamericanos "sumisos, que aceptaban cualquier cosa" de parte de los EEUU. "Revise esas leyes, lo duras que son, impuestas por los norteamericanos a inicios del 90 en toda Latinoamérica: represivas, sancionan básicamente la producción, (pero) no hacen nada en sus países" para controlar el consumo, dijo.

Durante la entrevista, Correa anunció que viajará "en los próximos días a Venezuela" para visitar a su par Hugo Chávez, en recuperación de una radioterapia contra el cáncer. Añadió que se le ha informado que el mandatario está "muy bien".