El presidente ratificó que hizo todo lo que debía para que el mandatario derrocado vuelva al país, única condición que hacía falta para la normalización. El pacto fue facilitado por Juan Manuel Santos

Casi dos años después del último golpe de Estado, los hondureños lograron normalizar su situación política a través del acuerdo que rubricaron el actual presidente, Porfirio Lobo, y el derrocado mandatario Manuel Zelaya.

 

La ceremonia tuvo lugar este domingo en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias, y contó con la presencia del canciller venezolano, Nicolás Maduro, y del gobernante local, Juan Manuel Santos, quien fue responsable de las gestiones para que el acercamiento se concrete.

El pacto pone fin a meses de disputa intestinas, al tiempo que abre las puertas para que la Organización de los Estados Americanos (OEA) readmita a Honduras tras su suspensión. El secretario general del organismo, José Miguel Insulza, dijo que informará este lunes al Consejo Permanente y su admisión podría ocurrir a principios de junio, cuando se celebre la Asamblea General.

De ese modo, Lobo verá consumada una de sus máximas aspiraciones de gobierno, mientras que Zelaya, que desde su caída se encuentra exiliado, volverá a su país libre de los varios procesos judiciales que lo perseguían. El regreso del ex mandatario está pautado para el próximo sábado 28, día en que sus seguidores prometieron esperarlo con una gran movilización.

La mediación de Colombia también se planteó el objetivo de trabajar para que gobiernos como el de Hugo Chávez accedan a reconocer nuevamente a honduras en el organismo continental.

Zelaya se mostró complacido con el acuerdo "para la reconciliación y la democracia"  al que calificó como "un avance sumamente importante, histórico" para su país. Además destacó que la mediación ha constituido un "pilar fundamental".

Tras la firma del documento, trascendió que Zelaya y Maduro viajarán a Nicaragua para entrevistarse con el presidente Daniel Ortega, y los mandatarios de El Salvador, Mauricio Funs, y de Guatemala, Álvaro Colom, para analizar el regreso de Honduras a la OEA.

El acuerdo establece:

1. Enmarcar todas las acciones y decisiones del gobierno de Honduras en el estricto cumplimiento de la Constitución y la ley

2. Garantizar al ex presidente José Manuel Zelaya Rosales su regreso a Honduras, con reconocimiento pleno de sus derechos (...), en condiciones de seguridad y libertad

3. Profundizar en las garantías otorgadas para el regreso en condiciones de seguridad y libertad a los ex funcionarios del gobierno del Ex Presidente (...) y demás personas afectadas por la crisis que hoy se encuentran en el exterior

4. Saludar la decisión de las autoridades competentes de anular los procesos judiciales en contra del Ex Presidente.

5. Velar de manera especial por el cumplimiento de la Constitución de la República en lo referente a las garantías de respeto y protección de los derechos humanos.

6. Velar por el cumplimiento de todas las garantías que la ley concede para que el Frente Nacional de Resistencia Popular solicite su inscripción ante el Tribunal Supremo Electoral y participe democráticamente en los procesos políticos electorales de Honduras.

7. Reiterar que la reforma al Artículo 5 de la Constitución hondureña regula la convocatoria de plebiscitos con procedimientos claramente establecidos, lo cual permite la posibilidad para que el pueblo pueda ser consultado.

8. Reconocer la creación de la Secretaria de Justicia y Derechos Humanos como entidad que permita fortalecer las capacidades nacionales para la promoción y protección de los derechos humanos en Honduras.

9. Constituir la Comisión de Seguimiento integrada originalmente por los cancilleres de Colombia y Venezuela, la cual entrará en funciones tras la firma del presente acuerdo.