Blogueros en el centro de la diana Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Lunes, 11 de Abril de 2011 09:13

 

Raúl Castro, ha sido considerado por Reporteros Sin Fronteras (RSF) el enemigo número 1 de internet, según denuncian en su informe anual. «Cuba tiene más miedo a los blogueros que a los disidentes tradicionales», precisa esta organización.

Pese a que la 'primavera' irrumpió con fuerza en Egipto y acabó con los 30 años del Gobierno de Hosni Mubarak, sus sucesores parece que todavía sienten miedo a la libertad.

El consejo militar que se hizo cargo del poder tras la marcha del dictador ha generado "un peligroso precedente", según denuncia la organización Human Rights Watch , tras detener a un popular bloguero, Maikel Nabil, por criticar a las fuerzas armadas.

Nabil, de 25 años, fue arrestado el pasado 28 de marzo acusado de "insultar a la jerarquía militar" y "divulgar falsa información" por cuestionar en su blog el Gobierno interino de los militares.

Pero, desgraciadamente, la historia de Nabil �que se enfrenta a una condena de tres años de cárcel� no es una excepción. Dirigentes de todo el mundo han puesto en el punto de mira a estos revolucionarios del ciberespacio.

Para el presidente venezolano, Hugo Chávez, "internet no puede ser una cosa libre donde se haga y se diga lo que sea" y han sido muchos los que se han tomado en serio esta máxima y se han puesto manos a la obra para amordazar cualquier atisbo de disidencia.

Internet, el principal enemigo

Un buen amigo del bolivariano, el presidente cubano, Raúl Castro, ha sido considerado por Reporteros Sin Fronteras (RSF) el enemigo número 1 de internet, según denuncian en su informe anual. «Cuba tiene más miedo a los blogueros que a los disidentes tradicionales», precisa esta organización.

Cada vez son más los regímenes autoritarios que se han dado cuenta del poder movilizador que tienen los blogueros y las redes sociales como Twitter o Facebook y han intentado contrarrestar sus efectos utilizando los mismos instrumentos �como ocurrió en Cuba con la asociación oficial de blogueros� o recurriendo a la represión sin miramientos.

Cuba, Arabia Saudí, Birmania, China, Cuba, Corea del Norte, Irán, Uzbekistán, Siria, Turkmenistán y Vietnam tienen el dudoso honor de encabezar la lista negra que elabora cada año RSF. Venezuela, Libia, Bielorrusa, Emiratos Árabes Unidos, Corea del Sur, Rusia y Turquía entre otros se encuentran bajo vigilancia por considerar internet como un enemigo, al que conviene tener bajo control.

El egipcio Nabil se situó en el centro de la diana con sus críticas al consejo militar y en Siria, otro bloguero, Ahmad Hadifa, conocido como Ahmad Abu Al-Kheir, fue detenido el pasado 20 de febrero en Baniyas. El delito de este estudiante de periodismo de 28 años: denunciar en su blog la represión sobre otros blogueros sirios y exigir al régimen de Bashar Asad cambios democráticos. Hadifa fue finalmente liberado tras pasar cuatro días en prisión.

De otros tres blogueros sirios nada se ha sabido desde su detención. Organizaciones de derechos humanos han exigido al Gobierno sirio qué desvele el paradero de Firaz Akram Mahumd, Ahmed Ben Farhan y Ahmed Ben Abdelhalim.

Ecos revolucionarios

Aromas de la revolución del jazmín llegaron hasta el lejano Oriente desatando la preocupación entre las autoridades chinas. Según denuncia Amnistía Internacional , más de un centenar de activistas y muchos usuarios de Twitter y otras redes sociales fueron arrestados, vigilados o sometidos a maniobras de intimidación, en la peor campaña represiva desde 2009, cuando se detuvo a millares de personas tras los mortales disturbios de Urumqi, capital de la región autónoma uigur del Sin-kiang.

Si fue, precisamente, un bloguero, Wael Ghonim el que prendió la llama de la insurrección popular en Egipto, ha sido otro, Maikel Nabil, el que ha recordado al mundo que en los países donde triunfó la primavera árabe y, en muchos otros, todavía no han florecido en libertad las semillas que se plantaron.