Crisis castrista: La Habana pide al Club de París una moratoria de su deuda hasta 2022 Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Jueves, 21 de Mayo de 2020 04:50

Dos carretones transportan carbón en Cuba.

El Gobierno cubano pidió a sus acreedores de deuda del Club de París suspender hasta el año 2022 los pagos de las sumas pendientes para evitar mayores presiones a su economía, que sufre las consecuencias de la pandemia del coronavirus, aseguraron varias fuentes diplomáticas a la agencia AFP.

En una carta dirigida al grupo de los 14 países acreedores de Cuba, que incluye principalmente a Francia, España, Canadá y Japón, el viceprimer ministro Ricardo Cabrisas propuso "una moratoria para 2019, 2020 y 2021, y volver a pagar en el 2022", dijo una fuente diplomática, cuya información fue confirmada luego por otras dos fuentes.

Según esta fuente, la propuesta cubana apunta a que en 2021 se realice un análisis de la situación económica para ver si el país se ha recuperado lo suficiente de la crisis para asumir nuevamente los pagos.

El acuerdo con el Club de París es crucial para las autoridades de la Isla: en 2015 Raúl Castro negoció con este organismo la reestructuración de su deuda con 14 países, que aceptaron condonar 8.500 de los 11.100 millones adeudados.

El saldo restante se convirtió en proyectos de inversión o se escalonó su pago hasta 2033.

Esto había normalizado las relaciones financieras de La Habana con esos países, luego de la condonación casi total de la deuda por parte de China en 2011 (6.000 millones de dólares), México en 2013 (500 millones) y Rusia en 2014 (35.000 millones).

Pero la pandemia del coronavirus ha agravado la ya crítica situación económica que vive la Isla, al paralizar el turismo y afectar las remesas, dos de las principales fuentes de recursos del Gobierno.

Afectada por los retrasos en la reforma de su sistema económico, la crisis de su aliado estratégico Venezuela y por la intensificación del embargo de Estados Unidos, La Habana ya había pedido a inicios de 2020 una primera moratoria para la deuda de 2019, cuyos servicios se había comprometido a pagar a más tardar a finales de mayo de 2020.

En febrero, justo antes del inicio de la pandemia del Covid-19 en la Isla, los acreedores de la deuda cubana habían mostrado su impaciencia con la demora de los nuevos pagos.

"Nos encontramos con Ricardo Cabrisas a comienzos del año", contó un diplomático europeo en La Habana a AFP. Pese a su "tono derrotista", "nos dijo que su país no deseaba entrar en suspensión de pagos", como sucedió en 1986, agrega.

Según una fuente diplomática, Cuba debía reembolsar en 2019 entre "32 y 33 millones" de dólares, de un total de 82 millones adeudados. Por el retraso, tendría que abonar, además, un 9% de intereses.

"El no pago completo a los acreedores del Club de París da muestras de lo complejo de la situación económica y financiera cubana", opinó entonces el economista cubano Pavel Vidal, de la Universidad Javeriana en Colombia.

"Cuba, desde hace al menos tres años tiene todos los síntomas de una economía en recesión y atravesando una crisis de balanza de pagos", y "es bien complicado salir de ese círculo vicioso (...) sin recibir la ayuda de un prestamista internacional (...) como el FMI, y además enfrentando la escalada de las sanciones de EEUU y los efectos de la crisis venezolana", consideró Vidal.

Según las últimas cifras oficiales, la deuda externa aumentó un 53% entre 2013 y 2016, y llegó a 18.200 millones de dólares.

La Comisión Económica para América Latina (CEPAL) pronosticó una caída del PIB cubano del 3,7% en 2020, pero muchos expertos creen que la caída será aún más fuerte, ya que el país estaba en dificultades financieras previas.

Cuba importa el 80% de lo que consume, pero ya "recortó un 75% las importaciones en el primer trimestre", por falta de divisas para pagarlas, señaló a AFP el economista Omar Everleny Pérez. "Es peor que durante el 'Período especial'", dijo.

Los cubanos, que se ven obligados a arriesgar su salud en colas tumultuarias con tal de conseguir alimentos, encaran una emergencia alimentaria.

"El Gobierno puso a sembrar cultivos de ciclos cortos" para cosechar "en tres meses", pero estamos entrando en la temporada de huracanes, potencialmente devastadora para la agricultura, consideró Everleny Pérez.

Al pedir una moratoria al Club de París, el Gobierno quiere evitar caer en el incumplimiento total, como hizo en 1986 Fidel Castro, quien impulsó una campaña internacional para que otros países se sumaran a su iniciativa de no realizar los pagos.

La Isla espera aprovechar una indulgencia del Club de París en busca de un respiro, semejante al que proporcionó recién el G20, que suspendió por un año el servicio de la deuda de los países más pobres, incluidos cuarenta de África.

El Banco Mundial y el FMI han prometido estar al lado de los países frágiles. Pero Cuba no forma parte de ninguno de los dos organismos.

DIARIO DE CUBA

Última actualización el Sábado, 23 de Mayo de 2020 00:58