Desde el infierno observé de muy mala gana la gorra gigante que unos estúpidos hicieron como un homenaje a mi memoria. ¡Que clase’e chabacanería compadre! Después que me he pasa’o años cuidando mi imagen, aparecen esos comemierdas con esa cosa tan fea, ¡le ronca el mango! Yo creo que tu le has da’o bola a esa gorrona pa’desprestigiarme.

Una cosa que me gustó mucho fue la pila de ataques sónicos que mis gentes hicieron en la Habana contra los agentes del imperialismo. No comas tanta mierda con lo’jamericanos que lo que quieren es llenar de care’puerco la isla, después de lo cual vas a tener que irte pa’Rusia, si es que Putin te quiere por allá, ya que lo único seguro es Corea del Norte, donde hace un frío que le ronca y donde el coñac que te gusta es difícil de conseguir.

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Jorge Hernández Fonseca

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Sent: Sábado, 25 de Noviembre de 2017

Subject: “Un año sin Fidel”

Gran Hermano:

Lució muy mal que no asistieras al acto conmemorativo en mi nombre que se dio en la isla con motivo del primer aniversario de mi muerte. ¿Qué me quisiste mandar a decir con ese desprecio? Acá en el infierno me dijo Pol Pot que te mandara a cortar la cabeza con un azadón, porque eso era traición. Yo sé que estás bajo cuidados médicos por la bebedera de siempre, pero una simple ida a sentarte en ese acto no hubiera lucido nada mal.

Yo desde acá veo que todo es conmemoración, pero la concreta es que tronaste a toda mis gentes, incluso a mi viejita Dalia y a mis hijitos. Por otro lado, metiste preso a Llompar preguntándole ¿donde estaba es dinero que yo tenía escondido? Raúl, acuérdate que el dinero está nombre mío porque no tengo confianza en nadie, por eso no te voy a decir donde lo tengo deposita’o. No fastidies más con eso, que Llompar no tiene la culpa.

Por otra parte, te veo medio mariconeao con Díaz Canel, que por ser marido de tu hija le vas a dar el poder de jamón. Cuídate, que cuando tu “cantes el manisero” ese oportunista lo que va a hacer es tumbar del caballo a to’a tu gente, tal como me hiciste tu a mi, y quien sabe si se va con “la de trapo” de hacerle swing a la sociedá de consumo, tal como hicieron los chinos en su tiempo, pa’que la gente pudieran tener almuerzo y comida.

Desde acá observé de muy mala gana la gorra gigante que unos estúpidos hicieron como un homenaje a mi memoria. ¡Que clase’e chabacanería compadre! Después que me he pasa’o años cuidando mi imagen, aparecen esos comemierdas con esa cosa tan fea, ¡le ronca el mango! Yo creo que tu le has da’o bola a esa gorrona pa’desprestigiarme.

Una cosa que me gustó mucho fue la pila de ataques sónicos que mis gentes hicieron en la Habana contra los agentes del imperialismo. No comas tanta mierda con lo’jamericanos que lo que quieren es llenar de care’puerco la isla, después de lo cual vas a tener que irte pa’Rusia, si es que Putin te quiere por allá, ya que lo único seguro es Corea del Norte, donde hace un frío que le ronca y donde el coñac que te gusta es difícil de conseguir.

Mucho cuida’o cuando te mueras, mira que “el que a hierro mata, a hierro muere” y to’lo que hiciste con mi gente, Díaz Canel lo va a hacer con la tuya; acuérdate que no es lo mismo, “dar muchos homenajes y hacer tronar tu nombre como culto a tu personalidad después de muerto, que tronar todas la gente que tu nombres y dejarlos medio muerto”.

Tu hermano mayor

Fidel Castro