El envío de remesas a Cuba alcanzó la cifra récord de 3.354,12 millones de dólares en 2015, reveló la consultora The Havana Consulting Group (THCG) y señaló esas transferencias como una de las actividades "que más se han favorecido" con la nueva política de Washington hacia La Habana.

En un artículo publicado en internet, el presidente de THCG, Emilio Morales, indicó que de 2008 a 2015 las remesas crecieron en 1.907,06 millones de dólares, con una media anual de 238,3 millones de dólares, "un hecho sin precedentes en el mercado cubano".

"El impacto ha sido tan grande que el mercado cubano se ha convertido en el de mayor crecimiento de Latinoamérica desde el 2008 al 2014", señaló Morales.

En ese último año, según el experto, Cuba subió al séptimo lugar entre los receptores de remesas de América Latina, con un volumen de 3.128,93 millones de dólares.

A la cabeza se situaron México (23.645), Guatemala (5.544), Republica Dominicana (4.571), El Salvador (4.217), Colombia (4.093) y Honduras (3.353).

De continuar esa tendencia de crecimiento, en los próximos cinco años Cuba podría superar a Colombia, Honduras, el Salvador y a la República Dominicana, opinó el presidente de THCG, con sede en Miami.

Entre los factores que han influido en el incremento del flujo de dinero a Cuba, Morales consideró el aumento de la emigración, el levantamiento de restricciones al envío de remesas y a los viajes de los cubanoamericanos a la Isla por parte del Gobierno estadounidense, la apertura al sector privado y la implementación de nuevas regulaciones migratorias por parte de La Habana

La emigración, señaló el experto, ha sido mayor desde que Raúl Castro ascendió al poder, en comparación con los últimos cuatro años de mandato de su hermano Fidel.

"Llama la atención que en ese período se han producido los picos migratorios más altos después del éxodo del Mariel en 1980, aun cuando el país está inmerso en proceso de reformas económicas", dijo Morales.

"Los números indican que estas reformas hasta ahora no han beneficiado a una gran parte de cubanos, muchos de los cuales optan por buscar mejores opciones de vida en otros países, principalmente en los Estados Unidos", añadió.

Por otra parte, Morales calificó de "descomunal" el incremento de los viajes de cubanoamericanos a la Isla bajo la flexibilización puesta en marcha por Washington.

Como promedio, cada cubano viaja con entre 3.200 y 3.500 dólares en efectivo, dijo.

"En el año 2015, el conjunto de cubanoamericanos que viajaron a la Isla, y los cubanos residentes en la Isla que viajaron a Estados Unidos y después regresaron a Cuba, sumaron 538.433 pasajeros", precisó el experto. Esto significa que el número de cubanos que viajó a la Isla creció 3,27 veces, en comparación con los que viajaron en 2007, para un incremento del 328%, explicó.

Las remesas apuntalan la economía cubana

Los más de 3.354 millones de dólares en divisas que entraron a Cuba por concepto de remesas en 2015 superaron los ingresos de varios sectores estratégicos de la economía, como la exportación de níquel, el azúcar, el tabaco, los medicamentos e incluso los ingresos por turismo.

El balance total de esta ayuda familiar (6.634 millones, sumando dinero y bienes) "es superior a la suma de los ingresos de los cinco rubros productivos más importantes de la economía del país, los cuales suman en conjunto 5.168,9 millones de dólares", dijo Morales.

El experto recordó que, desde hace varios años, "las remesas constituyen la principal fuente de ingresos de las familias cubanas".

"En el 2015, su volumen en efectivo superó 1,95 veces el valor del volumen del salario promedio anual de todos los trabajadores del país", agregó.

Las remesas son además "el soporte financiero fundamental del comercio minorista dolarizado, que es controlado mayoritariamente por el Estado", indicó.

Morales abogó por un reconocimiento de la personalidad jurídica de las pequeñas y medianas empresas que permita "alinear de manera legítima el envío de remesas con el desarrollo de las pymes (pequeñas y medianas empresas) en el país".

Esto permitiría que el microcrédito "juegue un papel significativo en el desarrollo empresarial" y reconocería que tanto los cubanos que viven dentro como los que residen fuera de la Isla "constituyen un motor natural e imprescindible para el desarrollo económico del país, independientemente de la importancia y el rol que tienen las inversiones extranjeras en el actual contexto".

"No reconocerlo sería un acto de suicidio (…) La combinación acelerada de ambos factores es la fórmula más eficaz para sacar al país del subdesarrollo", concluyó Morales.

DIARIO DE CUBA