Los tres opositores detenidos el domingo en la Plaza de la Revolución tras acercarse al papamóvil están en huelga de hambre desde el día que fueron arrestados. Se encuentran en la unidad de 100 y Aldabó de La Habana, informaron a DIARIO DE CUBA fuentes de la disidencia.

Zaqueo Báez, María Josefa Axón e Ismael Bonet son activistas de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU). Axón además es Dama de Blanco. Un grupo de mujeres del grupo se personaron esta mañana en la unidad policial para acompañar a familiares de los activistas, informó el opositor José Daniel Ferrer.

Berta Soler explicó que los tres activistas están bajo "proceso investigativo" y que las autoridades les acusan de haber "violado la seguridad del Papa y nacional".

Los opositores en huelga de hambre lograron romper el cordón de seguridad del papamóvil y una vez frente al Papa gritaron consignas antigubernamentales. Los agentes de seguridad del Santo Padre los frenaron y entregaron a la policía cubana.

Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos se pronunció el lunes sobre los disidentes cubanos que no pudieron asistir a algunos de los eventos papales a los que habían sido invitados, porque fueron detenidos o prohibidos de salir de sus casas por fuerzas de seguridad.

"Estados Unidos ha dicho por largo tiempo que el Gobierno cubano, esté o no el Papa en la Isla, debería hacer un mejor trabajo protegiendo los derechos humanos básicos de sus ciudadanos, incluidos aquellos que pueden tener críticas en su contra", dijo el secretario de prensa Josh Earnest.

"Eso es parte del respeto a los derechos humanos básicos de los seres humanos, y creemos que el Gobierno de Cuba tiene la responsabilidad de hacer un mejor trabajo para proteger esos derechos humanos", señaló, en respuesta a una pregunta de periodistas el lunes en la Casa Blanca, informa VOA News.

La líder del grupo opositor cubano Damas de Blanco, Berta Soler, denunció el fin de semana que 22 de las 24 integrantes de la organización  que quisieron asistir a misa del papa Francisco en La Habana, fueron impedidas de hacerlo por fuerzas de seguridad cubanas.

Martha Beatriz Roque y Miriam Leiva dijeron que recibieron invitaciones de la Oficina del Embajador papal en La Habana, pero fueron arrestadas cuando trataron de salir hacia la catedral.

El vocero del Vaticano, monseñor Federico Lombardi, dijo que algunos disidentes fueron invitados a eventos para recibir un saludo del Papa, pero que no sabía por qué el saludo no tuvo lugar.

DIARIO DE CUBA