Una reconocida disidente y líder de la proscrita Coalición Central Opositora llegó exiliada a Miami en medio de una intensa actividad represora del gobierno cubano para silenciar a las voces independientes y frenar sus demandas ciudadanas.

Juan Carlos Chavez

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Idania Yáñez Contreras, de 39 años, arribó en horas de la noche del jueves junto con familiares cercanos, su esposo, Alcides Rivera, y sus tres hijos menores. Yáñez fue recibida en el Aeropuerto Internacional de Miami por miembros del exilio local y representantes del Directorio Democrático Cubano.

“He salido de Cuba con el corazón roto, nunca quise abandonar a mis compatriotas, pero la situación y el hostigamiento que hemos sufrido fueron muchos”, dijo Yáñez en una entrevista a El Nuevo Herald.

La Coalición fue fundada en abril del 2008. Coordina las actividades de la oposición y la sociedad civil en las cinco provincias centrales de la isla. El testimonio de Yáñez sobre las agresiones, golpizas y consistentes violaciones a los derechos humanos contra la oposición pacífica y decenas de mujeres disidentes han sido tema de análisis y debates en organismos internacionales, como la Organización de Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos.

A su llegada, Yáñez aseguró que continuará “luchando” por las libertades individuales y la democratización de Cuba.

“La represión en las calles se ha generalizado y la policía esta constantemente vigilando a los opositores. Sin embargo hay mucho activismo y descontento popular”, señaló Yáñez.

En meses recientes Yáñez fue detenida en varias ocasiones y amenazada por las autoridades del gobierno cubano con juicios sumarios. En enero fue atacada por agentes de la policía política cuando se dirigía junto con otros disidentes a indagar por la suerte de un grupo de activistas pacíficos que fueron detenidos sorpresivamente en Santa clara. Cuando se acercaban a la Quinta Unidad de la Policía Nacional Revolucionaria fueron atacados por los agentes.

En otra ocasión Yáñez fue arrestada con violencia en los alrededores del hospital Arnaldo Milián Castro, en Santa Clara. La mujer permaneció varias horas detenida en una estación policial. Su delito: haber hecho el intento de visitar a dos activistas hospitalizados de emergencia y en huelga de hambre.

El exilio forzado de Yáñez coincide con el aumento de la represión política y la falta de garantías en la isla. Reportes independientes han denunciado que las autoridades cubanas alientan una política de cero tolerancia y apoyan actos de hostigamiento para impedir que los opositores asistan a actividades.

Los operativos contra las filas disidentes continúan agravando la ya crítica situación interna. Sólo en octubre, la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional denunció 520 detenciones contra las filas disidentes por motivos políticos. En su informe se detalló el alto nivel de represión y los consistentes actos de hostigamiento, persecución y acoso.