El regreso de Lula profundiza la inmensa soledad política de Dilma Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Lunes, 29 de Febrero de 2016 13:09

Por Rogelio Núñez.-

Dilma Rousseff se ha quedado sola, políticamente sola, en un segundo mandato que va a resultar una pesadilla, en caso de que lo acabe, algo que además está por ver. No cuenta con el respaldo de la mayoría de la población, los mercados están en su contra y su partido, el PT, es cada vez más crítico.

(Infolatam)-. Y por si eso fuera poco ahora su mentor, Lula da Silva, se coloca en la carrera para las presidenciales de 2018 lo cual, más pronto que tarde, puede conducir a importantes desencuentros y estrategias no coincidentes entre la actual presidenta y su antecesor.

Y todo este ambiente de grandes tensiones políticas se da en plena crisis institucional (con el impeachment en el horizonte) y con una situación de recesión económica y alta inflación.

Moody’s Investors Services ha sido la tercera agencia de calificación crediticia en reducir la nota de solvencia de la deuda brasileña hasta el grado de especulación. S&P lo hizo ya este mismo mes de febrero y Fitch en 2015.

La sombra del impeachment vuelve a sobrevolar

Su situación legal y la sombra de un impeachment que se había difuminado en este comienzo de 2016 ha vuelto a crecer a raíz de la detención de Joao Santana, publicista de las campañas presidenciales de Dilma Rousseff y del expresidente Lula da Silva.

Santana es investigado por la justicia brasileña por recibir pagos en el extranjero que provenientes de sobornos en Petrobras.

datafolha dilma valoracion

Sondeo de Datafolha (Brasil)

La justicia investiga si los pagos por $ 7,5 millones recibidos por los Santana se deben a servicios prestados al Partido de los Trabajadores.

Habría sido efectuados por Odebrecht y un operador financiero con fondos procedentes de sobornos de Petrobras.

Acto seguido, tras la detención de Santana, el Tribunal Superior Electoral de Brasil ordenó investigar a siete empresas que prestaron servicios a la campaña de Dilma Rousseff en 2014.

La decisión fue tomada por el magistrado Gilmar Mendes, encargado de tramitar la denuncia formulada por el opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) por supuestos fraudes en las finanzas del comité de campaña de Rousseff.

Esa denuncia del PSDB se asegura que durante la campaña de 2014 la fórmula integrada por Rousseff y su vicepresidente, Michel Temer, incurrió en “abusos con cadenas nacionales”, “manipulación de datos socioeconómicos”, “uso indebido de predios públicos” y propaganda electoral en “períodos de veda”.

Apoyo ciudadano en mínimos

Toda esta polvareda no hace sino hundir el apoyo popular a la mandataria.

La aprobación del gobierno de la presidenta brasileña Dilma Rousseff es del 11%, según un sondeo de la encuestadora Datafolha difundido este sábado 27 de febrero,.

Además que 60% quiere el juicio político de la mandataria y 58% pide su renuncia. El rechazo al Ejecutivo se coloca en el 64%.

En marzo de 2013, Datafolha mostraba que la popularidad de Rousseff llegaba a un máximo del 65% y después de ubicarse en 42% en diciembre de 2014 cayó abruptamente a raíz del escándalo en la estatal Petrobras. En agosto pasado alcanzó mínimos históricos de 8%.

Así pues Dilma cumple un trienio en el que no ha logrado levantar cabeza en lo que se refiere a su aceptación popular y más allá de su reelección ajustada en 2014 el viento le ha soplado hasta ahora en contra.

El PT cada vez más crítico con Dilma

Mientras las diferencias entre Dilma y el PT no dejan de aumentar.

Eso se transparenta en temas simbólicos y también de peso. Entre los primeros: La presidenta no estuvo este fin de semana en el 36 aniversario de la creación del partido fundado por Lula da Silva.

Entre los segundos que el Partido de los Trabajadores (PT) acaba de aprobar un documento crítico (“Programa Nacional de Emergencia”) con la política económica de Dilma.

Son 16 propuestas en la que apoya, como señala el diario La Nación “el uso de las reservas internacionales de Brasil para hacer obras de infraestructura, saneamiento y vivienda; aboga por el aumento de impuestos sobre el capital y a las personas más ricas; plantea la reducción de la tasa de interés básica; recomienda un reajuste del 20% en los valores del programa de transferencia de renta directa Bolsa Familia, hoy congelados por la difícil situación económica”.

dilma_e_o_destino Además, en el PT ha sentado muy mal que el Senado brasilero aprobara el Proyecto de Ley del Senado obra el opositor José Serra (PSDB de San Pablo) por 40 votos a favor y 26 en contra.

El proyecto fue acordado entre el gobierno de Dilma, el PMDB y el PSDB. En el proyecto se revoca la participación obligatoria de Petrobras en el modelo de asociación público-privada para la explotación del petróleo en el área marítima conocida como el Pre-sal.

El senador Lindbergh Farias (PT) afirmó que Dilma ha traicionado a los senadores de la agrupación.

La senadora Gleisi Hoffmann (PT) sostuvo que “fue duro recibir al final del proceso de votación una propuesta del gobierno para flexibilizar la participación de Petrobras en la exploratación del presal”, pero agregó que “posicionarse contra el gobierno es todo lo que la derecha quiere”.

Pese a todo Dilma sostiene que cuenta y desea el apoyo del PT: “Preciso ayuda de todos los partido de mi base, PT, sobre todo que es el partido al cual yo pertenezco. Siempre pediré apoyo (a mi partido) y cuento con apoyo de ellos”.

Sin embargo, a la vez, asegura que una cosa es tener responsabilidad de gobiero y otra de partido: “No gobierno sólo para el PT sino para 204 millones de brasileños… Un partido es un partido. Un gobierno es un gobierno”.

La sombra de Lula atenazará a Dilma

Y en medio de esta situación, Lula da Silva amaga con lanzarse a la carrera por la presidencia en las elecciones de 2018. Lo hace cuando su imagen está más golpeada que nunca y lo hace asegurando que respalda a la presidenta pero admitiendo a la vez que hay diferencias entre el APT y el gobierno.

“Por más que tengamos desacuerdos en algunas cosas, Dilma tiene que tener la certeza de que éste es su lado. Ella nos necesita para poder sobrevivir a los ataques que viene sufriendo en el Congreso Nacional por parte de nuestros adversarios”, dijo Lula.

BRASILIA (BRASIL), 29/10/2015.- EFE / ED FERREIRA

Lula da Silva desea ser candidato presidencial en 2018

El expresidente buscaría regresar a Planalto (“Quiero decir bien alto: tendré 72 años y el tesón de alguien de 30 para ser candidato a la Presidencia de la República”) para lavar su imagen muy dañad por los escándalos.

“Acepto hasta que levanten mi secreto bancario y telefónico; si ese es el precio, sea. Pero cuando esto acabe quiero que me den un apartamento o una casa de campo… Ciertamente tiene aclaraciones para todas las cuestiones que están siendo abordadas. Pero no estamos de acuerdo con que se utilicen estos asuntos para llevar a cabo un proceso de destrucción pública de su imagen”, señaló Silva.

Las indagaciones judiciales investigan si Lula es propietario de un apartamento y una finca campestre, ambas en Sao Paulo, y si fueron reformadas por constructoras salpicadas por el gigantesco escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras.

Si bien el hundimiento del gobierno de Dilma Rousseff dañaría las opciones de Lula da Silva, también es verdad que las agendas del gobierno y el posible candidato pueden ser muy divergentes. El ejecutivo de Dilma ha optado por el ajuste mientras que el PT y Lula van a apostar por regresar a las políticas de la década pasada.

En ese sentido, el ministro de Comunicación Social de la Presidencia, Edinho Silva confirmaba hace unos días que “el Gobierno hizo lo correcto y creó un foro integrado por todos los interesados para crear una propuesta de consenso y que ya está funcionando. Es difícil, pero el diálogo y una propuesta pactada por todos, reduce las dificultades”.

Además, la estrategia de Dilma de tender puentes con la oposición puede verse seriamente dificultada por un Lula que apuesta por la polarización. Lula acusa a la oposición y a algunos medios de comunicación de ser los principales responsable de la campaña de desprestigio que padece y advierte de que, de ahora en adelante, “se acabó el ‘Lulinha’ de paz y amor” y que les dará “la respuesta que se merecen”.

Última actualización el Lunes, 29 de Febrero de 2016 13:10