EL CARDENAL CUBANO Y LA IGLESIA COMO PARTIDO

El Cardenal cubano sigue muy activo como vocero de la tirania castrista ante el gobierno estadounidense. Ya lo habia estado --tambien publicamente-- en el ambito nacional cubano, ante los presos politicos y sus familiares. Por cierto, todavia no han excarcelado a un solo preso de los que le dijeron al Cardenal que no saldrian al extranjero.

Recordemos que la intervencion cardenalicia comenzo cuando el gobierno castrista se encontraba en un serio problema ante un conjunto de situaciones que lo tenian acorralado: el martirologio de Orlando Zapata Tamayo, la tenaz resistencia de las Damas de Blanco y de Apoyo, la huelga de Guillermo Fariñas, la firmeza de la oposicion dentro y fuera de las prisiones y de Cuba, y una presion sin precedentes de la opinion internacional. Sin mencionar la crisis total en su economia y el desastre general de su proyecto "revolucionario". La sorpresiva aparicion del Cardenal en tal encrucijada resulto providencial para la tirania al ofrecerle una salida que no la comprometia a ningun cambio en su naturaleza represiva, a la vez que le escamoteaba el debido reconocimiento a los factores opositores y criticos dentro y fuera de Cuba.

El nuevo viaje del Cardenal para entrevistarse con altos miembros del gobierno estadounidense resulta sumamente preocupante por ser obvio que esta relacionado con algun intento de conciliar posiciones entre el gobierno de Estados Unidos y el de la tirania castrista, sin que la tirania haya mostrado voluntad de realizar cambios en su sistema violatorio de los derechos humanos de nuestro pueblo.

No olvidemos que el problema DE CUBA no es entre Estados Unidos y la tirania castrista, sino entre esa tirania y el pueblo cubano.

Por otra parte, recuerdo muy bien cuando --en mas de una ocasion-- el mismo Cardenal se molesto ante los reclamos para que hiciera algo en favor de los acosados opositores al regimen. Entonces el repitio que "la iglesia no es un partido politico de oposicion"... Ahora me pregunto si lo que queria decir era que --en su criterio-- la iglesia deberia ser un partido del gobierno...

Roberto Jiménez