Una abrumadora mayoría apoyó el proyecto exigido por la UE que amplía los ajustes. Sin embargo, el debate mostró que hay grandes diferencia dentro de la coalición gobernante

En un momento en que tres partidos -incluidos los socialistas, que son mayoría, y sus adversarios conservadores- participan en el nuevo Gobierno griego de coalición, el presupuesto fue aprobado el miércoles en la madrugada por 258 votos a favor y 41 en contra entre los 300 miembros del Parlamento.

"Este es un presupuesto difícil con objetivos ambiciosos", declaró el primer ministro Lucas Papademos a los legisladores antes de la votación realizada después de la medianoche. "Pero debemos aplicar las medidas que están previstas. La crisis financiera en nuestro país no es una tormenta pasajera. Ante la magnitud de los problemas, nuestro empeño nacional no concluirá en 2012. Tomará muchos años, y exigirá el esfuerzo y la insistencia de varios Gobiernos ", advirtió.

Los punzantes apuros por la deuda de Grecia han desencadenado una crisis de alcance europeo. El país sobrevive con préstamos de un rescate internacional, desembolsados a condición de que instrumente recortes en el gasto, algo que la población detesta. La crisis ha suscitado incluso versiones de que la nación sería expulsada de la eurozona, o hasta de la Unión Europea.

Papademos insistió en que ambos escenarios son impensables. "Nuestra posición en Europa no es negociable", enfatizó. "Los griegos la defenderán por todos los medios. Pero la participación en el euro implica reglas y obligaciones, que debemos cumplir en forma consistente . Grecia pertenece a Europa, y Europa no puede concebirse sin Grecia".

El fin del debate presupuestal coincidió con el tercer aniversario de la muerte de un joven a tiros por la policía en Atenas. Mientras los legisladores hablaban en el Parlamento, afuera estallaron enfrentamientos entre cientos de anarquistas y la policía antidisturbios durante una marcha que conmemoraba el aniversario.

En la noche del martes, varios jóvenes embozados le arrojaron piedras, botellas y bombas incendiarias a la policía, que respondió con gas lacrimógeno y granadas de aturdimiento. Horas antes también hubo incidentes violentos en la periferia de otra marcha de casi 2.000 estudiantes frente al Parlamento.

Durante el debate en la legislatura, el líder del partido conservador Antonis Samaras anunció que seguía objetando muchas de las medidas de austeridad ya aprobadas, pero que apoyaba el presupuesto porque la prioridad ahora era reducir la deuda. Y explicó: "Estamos votando hoy por el presupuesto, en primera parte porque le estamos dando prioridad inmediata a lograr la viabilidad de la deuda griega y para mantener los objetivos del ajuste fiscal".