Tras tres días de negociaciones sin avances, diplomáticos de ambos países se reunieron con el mediador de la ONU, Lakhdar Brahimi, al que le prometieron colaborar. La tregua humanitaria en Homs termina el sábado de noche

Estados Unidos y Rusia han prometido ayudar a desbloquear la situación en la Conferencia de paz Ginebra II sobre Siria, indicó el jueves el mediador de la ONU Lakhdar Brahimi después de reunirse con representantes de ambos países.

"Prometieron que ayudarían tanto aquí como en sus capitales y en otras partes para desbloquear la situación", declaró el mediador a la prensa.

Tras tres días de discusiones en Ginebra entre representantes sirios de la oposición y del gobierno, las negociaciones están bloqueadas y no hubo ninguna reunión este jueves entre ambas partes.

Brahimi se reunió durante más de dos horas con el viceministro ruso de Asuntos Exteriores Guennadi Gatilov y la Secretaria adjunta norteamericana Wendy Sherman.

Por la tarde, un responsable de la oposición Bader Jamus, secretario general de la Coalición, se manifestó insatisfecho tras un encuentro con diplomáticos rusos. También hubo otro de los opositores con los representantes estadounidenses.

Los rusos "continúan utilizando el mismo tono de siempre". Insisten en la prioridad del régimen, la lucha contra la violencia y el terrorismo, y "nos piden que nos pongamos de acuerdo con el régimen para combatir el terrorismo, lo que es inaceptable para nosotros", declaró Jamus, señalando que para ellos "el primer terrorista" es el presidente sirio, Bashar Al Assad.

Por su parte, Brahimi, en nombre de la ONU prometió agotar los recursos para avanzar en las negociaciones en sus reuniones con Gatilov y Sherman.

Según la oposición, este viernes habrá una nueva reunión con Brahimi de cada delegación por separado, lo que marcaría el final de esta segunda ronda de conversaciones.

Respecto a una eventual tercera ronda, la oposición considera que ahora Brahimi informará a la ONU en Nueva York y "después decidiremos si habrá nueva reunión, dependiendo de si el régimen cambia de actitud", advirtió Babus.

En Estados Unidos, el presidente Barack Obama se encontrará el viernes en California con el rey Abdalá II de Jordania para tratar sobre la crisis siria, antes de consultar con Israel y Arabia Saudí en las próximas semanas.

Todas las miradas convergen en Homs

En el terreno, la ONU indicó este jueves que 430 hombres de entre 15 y 55 años habían sido detenidos para ser interrogados cuando salieron de la ciudad vieja de Homs, en el centro de Siria, y que 181 fueron liberados enseguida.

Entre estos últimos, 111 fueron liberados el miércoles y 70 el jueves.

"Pensamos que aún quedan 2.000 personas en la ciudad vieja de Homs", precisó el vocero de Naciones Unidas, Martin Nesirky.

El vocero aseguró que la ONU "no ha recibido comunicación oficial" a propósito de una eventual prolongación de la tregua, que ha permitido, según él, la evacuación de al menos 1.370 civiles de Homs desde el viernes último.

Pero los equipos de la ONU siguen en el lugar y continúan haciendo el seguimiento de los hombres que son detenidos e interrogados por los servicios de seguridad sirios tras su evacuación del reducto rebelde.

"Seguimos preocupados por su suerte", afirmó Nesirky, aunque siguió sin pedir su liberación inmediata como ya hicieron París, Londres y Washington.

Desde el inicio del cese el fuego en Homs, la ONU entregó ayuda a 2.500 habitantes de la ciudad, incluyendo víveres para un mes.

Según el gobernador la región de Homs, Talal Barazi, la distribución de ayuda y las evacuaciones de civiles se reanudarán el viernes tras una suspensión de un día. La tregua que entró en vigor el 7 de febrero para permitir esas operaciones se mantendrá hasta el sábado de noche.

La responsable de las operaciones humanitarias de la ONU Valerie Amos consideró que la evacuación de la ciudad no es un progreso suficiente, y solicitó al Consejo de Seguridad que les brinde "los medios para poder realizar su trabajo".

Por otra parte, desde el comienzo de las conversaciones de paz en Ginebra, el 22 de enero, en Siria el número de muertos diarios nunca había sido tan elevado, alcanzando a unos 200, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH). El máximo en tres años de revuelta.

AFP