Entre los muertos por el bombardeo de la aviación en Alepo, hay 17 niños. En la última semana, mientras se realizaba la conferencia de paz Ginebra II, fueron asesinadas alrededor de 2.000 personas

Al menos 36 personas, entre ellas 17 menores y 7 mujeres, murieron este domingo en los bombardeos de la aviación del régimen sirio contra barrios ubicados en el este de la ciudad de Alepo, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

Asimismo, la organización opositora precisó que las fuerzas sirias lanzaron barriles explosivos sobre la parte antigua de la ciudad y los barrios de Tariq al Bab, Al Ashrafiya y Bani Zeid, que están controlados por los rebeldes al régimen de Bashar Al Assad.

Por otra parte, el OSDH anunció que un grupo islamista rebelde liberó este domingo a más de 400 personas que tenía retenidas en la zona de Al Raai, en la provincia de Alepo. Esta información no fue confirmada por otros grupos independientes que actúan en Siria.

El OSDH no citó el nombre del grupo insurgente pero señaló que esa decisión se produjo después del estallido de duros enfrentamientos en esa región entre grupos islamistas rebeldes y la organización radical Estado Islámico en Irak y Levante, vinculada a Al Qaeda.

El sábado, al menos 85 personas murieron en los bombardeos con barriles explosivos lanzados por el Ejército sirio contra diferentes zonas de la provincia de Alepo. Entre las víctimas mortales hubo 13 niños y al menos 10 combatientes del Frente Al Nusra, también vinculado a Al Qaeda.

En total, a la par de las conversaciones de Ginebra II que comenzaron el lunes y terminaron el viernes pasado en la ciudad suiza de Montreaux con la participación del Gobierno sirio, la opositora Coalición Nacional y representantes de la comunidad internacional, fueron asesinadas unas 2.000 personas en menos de una semana.

Las negociaciones entre el régimen de Al Assad y la oposición para dar fin a la guerra en Siria concluyeron sin dar los frutos que se esperaban. Los mediadores temen que no haya otra ronda, lo que generó una fuerte frustración a nivel mundial.

El conflicto que vive Siria desde marzo de 2011 ha causado ya unos 136.000 muertos, según el OSDH, mientras que seis millones de personas se han visto obligadas a desplazarse y más de dos millones se han refugiado en los países vecinos, de acuerdo con las cifras de Naciones Unidas.