El fallo que ordenó los castigos por la tragedia del estadio generó disturbios en Port Said. El Ejército busca retomar las calles. Videos

El Ejército egipcio decidió desplegarse este sábado en Puerto Saíd (nordeste) para restablecer la calma ante los enfrentamientos cuyo saldo se eleva minuto a minuto. El número de víctimas llegó a 30, tras conocerse que un tribunal condenó a 21 personas a la pena capital por los actos violentos que dejaron 74 muertos en febrero de 2012 después de un partido de fútbol.

Las fuerzas armadas quieren "restablecer la calma y la estabilidad en la ciudad de Puerto Saíd y proteger las instalaciones públicas", indicó Ahmed Wasfi, un general del ejército citado por la agencia de prensa oficial Mena.

Fuentes médicas informaron de la muerte de ocho personas, pero luego el número se amplió a 22. Se desconoce si este balance incluye a los dos policías fallecidos por disparos que las fuentes de seguridad anunciaron.

Familiares de los fallecidos celebran la sentencia. Luego hubo disturbios

En febrero de 2012, 74 personas murieron en Puerto Saíd después de un partido de fútbol entre Al Ahly -el gran club de El Cairo- y un equipo local, Al Masry. Fue la mayor tragedia del fútbol egipcio, después de que los cairotas sufrieran su primera derrota de la temporada (3-1).

Cientos de seguidores de Al Masry invadieron el campo y lanzaron piedras y botellas contra los de Al Ahly.

Durante los días posteriores, miles de personas marcharon contra las fuerzas de seguridad y la violencia entre policías y manifestantes dejó 16 muertos en El Cairo y en Suez.

Para intentar contener la violencia, fueron desplegados vehículos para el transporte de tropas del Ejército y policía militar en la población mediterránea de Port Said el sábado. La agencia de noticias estatal citó a un general diciendo que el Ejército fue enviado "para establecer la calma y estabilidad en Port Said y proteger las instituciones públicas".

Con los últimos datos, ya serían 39 los muertos en tres días de violencia en el país.

Cientos de personas han resultado heridas en enfrentamientos con la policía, que ha lanzado gases lacrimógenos a los manifestantes, armados con piedras y algunos cócteles molotov.

Los disturbios comenzaron en manifestaciones para conmemorar el segundo aniversario de la caída de Hosni Mubarak, ya que los participantes creen que el actual presidente, Mohamed Mursi y sus aliados islamistas han traicionado la revolución.