En Cuba 'querían eliminarla', dicen en Miami los médicos que atienden a Xiomara Cruz Miranda Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Jueves, 13 de Febrero de 2020 05:53

Xiomara Cruz Miranda está entubada y sedada en Miami.

Tres bacterias detectadas en análisis de laboratorio realizados a la Dama de Blanco Xiomara Cruz Miranda, quien logró salir de Cuba gracias a una visa humanitaria y está siendo atendida en el Hospital Jackson Memorial de Miami, podrían ser la prueba de que el régimen de La Habana le inoculó algún agente patógeno.

De acuerdo con el médico Alfredo Melgar, quien encabeza el equipo de facultativos que busca salvar la vida de la activista, Cruz Miranda tiene en su organismo las bacterias klebsiella, pseudomona y micobacteria, tres gérmenes "muy agresivos" que, de acuerdo con Melgar, pudieron haber sido introducidos a través de "una inyección".

"Eso fue lo primero que dijo la paciente al llegar a Miami, y también lo dijo varias veces estando en Cuba: que le habían inyectado algo", dijo el médico de origen cubano durante una rueda de prensa el martes, aunque reconoció que determinar la forma en que llegaron las bacterias al organismo de la Dama de Blanco "es prácticamente imposible", reportó Diario Las Américas.

El doctor precisó que las bacterias "pueden ser eliminadas con antibióticos", aunque "ya el daño en el cuerpo de Xiomara está hecho, y es muy grande, sobre todo a nivel pulmonar".

La Dama de Blanco es sometida a un tratamiento que incluye cinco tipos de antibióticos para combatir las bacterias, que han afectado principalmente uno de sus pulmones. Además, se encuentra entubada y bajo sedación en terapia intensiva.

El daño que habrían causado las bacterias llevó a sospechar a Melgar que la exprisionera política de 53 años pudiera padecer "leucemia o cáncer de pulmón". Sin embargo, advirtió que solo con una serie de pruebas "más rigurosas" se podrá establecer cuál es su padecimiento.

Sobre ese aspecto, dijo que es necesario realizar tres estudios, pero debido a lo debilitada que está la salud de Cruz Miranda no han podido hacerlos. "Hacen falta una biopsia de médula ósea, una biopsia de pulmón con una aguja guiada por un escáner y una endoscopía", explicó.

"Lo primero que se intentó fue hacer la prueba de médula ósea y no pudieron [los médicos que atienden su caso] porque ella [Xiomara Cruz Miranda] no soportó el estudio", afirmó.

Las bacterias Klebsiella, pseudomona y micobacteria "son muy fuertes" y "producen inflamación e infección en órganos vitales como los pulmones, hígado, corazón y riñones", refirió Melgar.

El equipo que atiende a la Dama de Blanco en Miami, integrado por un pulmonólogo, un hematólogo y un intensivista, revisó el resumen de historia clínica con los procedimientos realizados a Cruz Miranda en Cuba. "Todos los reportes que entregó Cuba estaban llenos de contradicciones", aseguró Melgar.

En algún momento incluso le pidieron a Cruz Miranda "que se fuera a casa, pero que no usara el oxígeno, porque supuestamente es malo. (...) Cómo se le va a decir a una persona que tiene un solo pulmón [trabajando bien] que no use oxígeno, teniendo una máquina de oxígeno que se le envió desde Miami. Si no usa oxígeno, se muere", enfatizó.

Para el doctor Melgar, hubo una "cadena de negligencias (...) desinterés por ver que es una disidente, que es una desafecta al régimen", como una "forma indirecta de eliminarla, como han hecho con otros".

Los antibióticos que usaron en Cuba, de acuerdo con lo que ha revisado el doctor Melgar y su equipo, tampoco fueron correctos, porque "no hicieron los estudios para determinar las bacterias que la están afectando. (...) Le dieron antibióticos al azar, a ciegas".

A pesar de este diagnóstico, la Dama de Blanco no tiene ya fiebre, cesaron las taquicardias y su presión arterial se ha estabilizado, lo cual es "muy buen signo", dijo Melgar.

El doctor aseguró que si Cruz Miranda no hubiera arribado el mes pasado a Miami para recibir la atención adecuada, "no hubiera sobrevivido".

Cruz Miranda llegó a EEUU el pasado 20 de enero, luego de una campaña de solidaridad realizada dentro y fuera de la Isla. La activista había sido diagnosticada con una tuberculosis luego de enfermar gravemente en la cárcel. Tras recibir una licencia extrapenal por parte del régimen cubano, estuvo ingresada en varias ocasiones sin que su estado de salud mejorara.

DIARIO DE CUBA