El documento, difundido por la agencia de noticias oficial egipcia MENA señaló que los llamamientos "extranjeros" en ese sentido son "rechazados" por El Cairo, que considera que contribuyen a empeorar "la situación interna de Egipto".

Ayer, Mubarak aseguró que no estaba dipuesto a renunciar al gobierno, pero aseguró que no se presentará para un nuevo mandato en las elecciones de septiembre.

El presidente tambien dijo que permanecerá en el poder hasta los próximos comicios con la "formación de un nuevo gobierno que responderá a las exigencias de los jóvenes".

Sin embargo, el mandatario egipcio dijo que pidió a su vicepresidente, Omar Suleiman, que inicie el diálogo con todas las fuerzas políticas.

No obstante, los principales opositores, como los Hermanos Musulmanes y el Nobel de la Paz, Mohamed ElBaradei, siguen reclamando la renuncia de todo el actual gobierno para iniciar un diálogo político.