Trump se trenza en una disputa con el presidente de la Corte Suprema Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Jueves, 22 de Noviembre de 2018 12:42

Donald Trump denunció ayer la existencia de “jueces pro Obama”, provocando así una fuerte polémica con el presidente de la Corte Suprema de Estados Unidos, el juez John Roberts, quien momentos antes había destacado la imparcialidad de los jueces estadounidenses. Roberts es un juez de tendencia conservadora y fue designado en el cargo por el presidente republicano George W. Bush.


Una polémica pública entre el presidente del país y el juez de más alto rango, es un hecho raro en Estados Unidos. En un comunicado difundido por la agencia AP, el juez Roberts dijo: “Aquí no hay jueces de Obama ni jueces de Trump, jueces de Bush o jueces de Clinton. Tenemos un conjunto extraordinario de jueces dedicados, que hacen todo lo que pueden para juzgar de manera equitativa a quienes comparecen ante ellos”.

Todo sucedió en la víspera del Día de Acción de Gracias, donde los estadounidenses agradecen por las cosas buenas que tienen. Es un día dedicado al pensamiento y la búsqueda de consenso. Tal vez por eso, el juez Roberts afirmó en su comunicado que “la independencia del sistema judicial es algo por lo cual todos nosotros debemos estar agradecidos”.

Roberts preside una corte integrada por cinco jueces conservadores y cuatro progresistas, cuya misión consiste en controlar que las leyes se ajusten a la Constitución del país.

Durante su campaña electoral en 2016, Trump criticó al juez Roberts porque con su voto preservó la ley de seguro nacional de salud creada por Obama. Ayer escribió en Twitter:“Lo lamento señor presidente de la Corte Suprema, John Roberts, pero existen efectivamente los jueces pro Obama”. El presidente acusó a los jueces de tomar decisiones “sorprendentes”, porque los tribunales rechazan sus repetidas iniciativas contra la entrada de inmigrantes .

Trump acusó en particular a la Novena Jurisdicción Federal de los tribunales de apelaciones, que incluye a California, por haber tomado decisiones “peligrosas y poco juiciosas” sobre temas migratorios.

Era una dura crítica al fallo del juez federal de distrito John Tigar, quien en San Francisco (en California) rechazó el decreto del 9 de noviembre donde el gobierno establecía que cualquier persona que hubiera cruzado ilegalmente la frontera sur de Estados Unidos (que es el límite con México) sería rechazado automáticamente y no podría recibir asilo.

La polémica entre Trump y la Corte Suprema ocurre en momentos en que más de 3.000 inmigrantes centroamericanos que llegaron en caravana desde Honduras, están ahora en la ciudad fronteriza de Tijuana, en México, con la esperanza de conseguir asilo en Estados Unidos El juez Tigar había aceptado la demanda contra el decreto de Trump presentada por la Unión Americana de Libertades Civiles. “Cualquiera sea la amplitud de la autoridad presidencial, no puede reescribir las leyes de inmigración para imponer una condición que el Congreso prohibió en forma expresa”, dijo el juez Tigar en su fallo, que irritó a Trump.

EL CLARIN; ARGENTINA; Fuente: agencias AP y EFE