Tras la revuelta que dejó 16 muertos en la cárcel de Maracaibo, el oficialismo admitió que existe un retardo procesal y prometió nuevas acciones en el Poder Judicial. Además, anunció un subsidio para las madres de los delincuentes. Duras críticas de la oposición

AFP

"El retardo procesal pasará a ser un mal recuerdo en la historia de la justicia penal en Venezuela", prometió el vicepresidente, Jorge Arreaza, para calmar los ánimos de los presos que habitan en los 52 penales del país, y también para la oposición y opinión pública, tras el asesinato de 16 personas en la cárcel de Maracaibo.

"El Poder Judicial va a tomar algunas medidas para que todos, fiscales, defensores, estén coordinados y no se justifique ningún tipo de retardo judicial", agregó este miércoles cuando, según informó la prensa local, al menos 550 reclusos fueron trasladados durante el día a otra dependencia del Servicio Penitenciario: la cárcel de Uribana. Allí, en enero de este año, 58 internos murieron en un enfrentamiento.

Arreaza anunció, también, que la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, "se va a trasladar", hasta el lugar donde fue el motín este martes, para anunciar las nuevas medidas.

Durante la noche de este miércoles, se confirmó que otros 133 internos serían reubicados en penitenciarias de los estados Miranda y Aragua, por lo que suman casi 700 los que dejan el penal de Maracaibo.

Según el Observatorio Venezolano de Prisiones, en los primeros seis meses de este año, 289 reos perdieron la vida en las cárceles del país, que albergan a 52.933 reclusos pese a contar con capacidad para apenas 16.539.

Sólo en el penal recientemente amotinado, durante 2013, habían muerto 53 personas.

"¿Qué tiene que pasar en Venezuela para que las cárceles sean centros para rehabilitar, para darle la oportunidad a los que se equivocaron de salir de allí con vida y salir para incorporarse a la sociedad para ser hombres y mujeres de bien?", indagó el líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles. "Desde aquí yo les mando la solidaridad a esas familias, porque el Estado no tiene respuestas para ellas", agregó.

El oficialismo activó, tras los 16 muertos de Maracaibo, medidas que estaban congeladas. Según anunció la legisladora María León, presidente de la Comisión de la Familia en la Asamblea Nacional, el chavismo destinará un subsidio estatal a las mujeres cuyos hijos estén en prisión, que se ampliarán en caso de que las madres estén afectadas por alguna discapacidad.

"Esto tiene que servir de lección a las autoridades que tienen que aprender a oír con altura a todos los sectores por muy duras que las verdades puedan ser", apuntó el Observatorio Venezolano de Prisiones, donde recordó que Sabaneta fue el escenario de la peor tragedia carcelaria venezolana ocurrida en enero de 2004 cuando fallecieron más de 100 personas.

Tras el motín, la prensa de Caracas se hizo eco de una cadena de denuncias realizadas por medios locales cercanos a la cárcel. Según El impulso de Barquisimeto, que levanta testimonios de funcionarios de la prisión, los delincuentes considerados "líderes" gozan de ciertos privilegios.

Fotos: El Universal

De hecho, el hombre que dirigió la última revuelta, causando 16 muertes, se autoproclamó recientemente como máxima autoridad entre los delincuentes de Sabaneta: Edwin Ramón Soto Nava, conocido como "El Mocho Edwin", quien ha dado entrevistas, por ejemplo, al diario La Verdad y también ante cronistas de El Universal.

En todos los casos, "Edwin" ha manifestado que conoce a la ministra de Asuntos Penitenciarios personalmente. También que dialogó con ella, y que la funcionaria está al tanto de la situación procesar del líder de la cárcel.