Chávez vivió ocho días para el olvido Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Miércoles, 29 de Agosto de 2012 09:04

En poco más de una semana hubo una tormenta tropical, 26 muertos en una cárcel, una protesta en plena cadena nacional y la mayor tragedia petrolera de la historia del país

Crédito foto: Reuters

 

La feroz explosión de la refinería de Amuay, que hasta el momento deja un balance de al menos 48 muertos, 6 desaparecidos y más de un centenar de heridos, conmocionó en los últimos días a Venezuela y al mundo, en la que ha resultado ser una de las peores tragedias en la industria petrolera mundial de los últimos 25 años.

Chávez no tuvo un segundo de calma. Recibió la noticia en las primeras horas del sábado en Caracas. Acababa de llegar de la localidad de Cumanacoa, donde los coletazos del paso de la tormenta Isaac por el Caribe provocaron fuertes lluvias y cuantiosos daños materiales.

La refinería, situada en el Centro Refinador Paraguaná (CRP), uno de los mayores del mundo, estaba en llamas y al menos medio millar de viviendas sufrían destrozos y derrumbes. Al otro día, Chávez se desplazó hacia la ciudad de Punto Fijo para conocer de primera mano la situación.


En la mañana de este martes, los bomberos pusieron fin a las llamas de Amuay. El gobernante salió en cadena nacional para celebrar la ocasión. Era la primera buena noticia luego de una cadena de malas. Siempre de campaña, Chávez aprovechó el espacio televisivo para contactarse con Cumanacoa. Mientras, los medios reportaban que una persona murió y dos desaparecieron por las lluvias en Caracas.

Sin embargo, el periplo de Chávez por el oriente del país había comenzado hace diez días, cuando viajó a Ciudad Guayana. El objetivo era, en el marco de la campaña, anunciar varias obras y realizar un encuentro con empleados del sector petrolero. No tuvo mejor suerte. Trabajadores de la estatizada industria siderúrgica le hicieron reclamos por la falta de contratos colectivos de trabajo.

"Recuerden una cosa, no me vuelvan a trancar (obstaculizar) las avenidas, eso no vale, trancar las avenidas", bromeó el presidente en el inicio del encuentro con los trabajadores de la nacionalizada Siderúrgica del Orinoco (Sidor). No le funcionó el comentario y en plena cadena nacional los trabajadores le siguieron expresando sus demandas.

Pero de un momento a otro la transmisión se interrumpió. Chávez todavía tenía el micrófono en la mano. El Gobierno trató de mostrar que la finalización fue algo “normal”, pero el periodista Nelson Bocaranda afirmó que el objetivo fue invisibilizar la protesta.

Ese mismo día, un enfrentamiento entre bandas rivales dentro del penal de Yare I, al sur de Caracas, dejó 26 muertos y agravó la crisis carcelaria. Ocurrió en el mismo lugar donde Chávez cumplió una condena por el fallido intento de golpe de estado en 1992. El mandatario no hizo ningún comentario al respecto.




Fuente: EFE