En un acto celebrado en la capital de Michoacán y acompañado por su gabinete, Peña Nieto anunció un plan que incluye “250 acciones” para impulsar el desarrollo social y económico de un estado azotado por la violencia del crimen organizado desde hace ya varios años.

El programa contempla el impulso a la creación de pequeñas y medianas empresas, apoyos para la actividad agropecuaria por un monto total de 3.500 millones de pesos (262 millones de dólares) y el mejoramiento de infraestructura viaria, portuaria, sanitaria y energética.

Además, incluye la concesión de créditos hipotecarios que beneficiarán a más de 24.000 familias, la construcción de nuevas escuelas, el otorgamiento de 350 mil becas a estudiantes de todos los niveles y la promoción de actividades culturales y deportivas.

El mandatario también anunció la ampliación a 115.000 beneficiarios de la pensión para adultos mayores de 65 años, la incorporación de 30 municipios de Michoacán en su cruzada contra el hambre y de 26.000 familias adicionales al programa social Oportunidades.

Convencido de que el uso legítimo de la fuerza pública es “insuficiente” para restablecer la seguridad en el estado, Peña Nieto destacó que, con “obras concretas y resultados visibles”, van a recuperar la confianza de la sociedad y transformar el estado.

El Gobierno mexicano aseguró hoy que minará “en breve el poder de los criminales” en el estado de Michoacán y reiteró que permanecerá en ese estado del suroeste del país hasta restablecer la seguridad y el desarrollo de la región.

“Tenemos la firme convicción de que en breve el poder de los criminales será minado de manera definitiva”, dijo el comisionado especial para Michoacán, Alfredo Castillo, en un acto encabezado en Morelia por el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto.

Al hacer un balance de la estrategia de seguridad lanzada por el Gobierno de Peña Nieto el 13 de enero pasado en Michoacán, destacó la detención de 334 presuntos responsables de hechos ilícitos, “incluidos 128 operadores de la delincuencia organizada”.

“Hemos logrado avances concretos en desarticulación de las capacidades operativas de los grupos criminales” que operan en el estado, así como en “la investigación y aseguramiento de diversos activos de su estructura financiera”, afirmó Castillo.

Sobre el acuerdo firmado el 27 de enero con los grupos de civiles que tomaron las armas para defenderse del cártel de Los Caballeros Templarios, dijo que ya hay 523 expedientes de ciudadanos de varios municipios interesados en formar parte de los cuerpos de guardias rurales.

Además, apuntó, se han registrado “813 armas y diversas diligencias para completar evaluaciones médicas y sicológicas de los interesados”.

En relación a los policías relevados de sus funciones en 27 municipios de Michoacán considerados prioritarios por el Gobierno federal, la mayoría de la conflictiva región de Tierra Caliente, Castillo señaló que 1.238 agentes están en proceso de evaluación y capacitación.

La seguridad de esos municipios fue asumida por policías federales, apoyados por militares, en el marco de la primera fase de la estrategia de seguridad, centrada en la recuperación del control territorial.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, destacó como resultados de la primera fase el control de la seguridad pública en 27 municipios, el debilitamiento de las estructuras criminales y el acuerdo con los grupos de autodefensas para que actúen en el marco de la legalidad.

La segunda fase de la estrategia consiste en sentar las bases para el desarrollo integral del estado, mientras que la tercera busca fortalecer las capacidades del gobierno y las instituciones en Michoacán para mantener la tranquilidad y potenciar el desarrollo del estado, recordó.

Tomado de INFOLATAM/EFE