Brasil: Crece presión sobre Rousseff por la Ley Forestal Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Sábado, 12 de Mayo de 2012 10:27

Tres grandes ONG iniciaron una campaña para frenar la norma, que consideran peligrosa para el medio ambiente. Casi 1,6 millones de personas han pedido a la mandataria de Brasil que vete la normativa

Crédito foto: Reuters

 

Se extiende el movimiento Veta Dilma, que ha encontrado un gran impulso con el chef Alex Atala, considerado el cuarto mejor del mundo, y la actriz Camila Pitanga, protagonista de las famosas telenovelas de un canal de televisión.

Tres de las mayores organizaciones no gubernamentales de conservación y movilización social, WWF, Greenpeace y Avaaz, comienzan una campaña para exigir a Dilma Rousseff el veto total al Código Forestal aprobado por el Congreso de los Diputados el pasado 25 de abril.

"Durante la última década, Brasil ha realizado un progreso ejemplar en la reducción de la deforestación en la Amazonía. Sabemos que la presidenta Rousseff está siendo muy presionada por aquellos que buscan un beneficio a corto plazo del bosque, pero le exigimos que defienda la protección de los recursos forestales, que son de importancia vital para el futuro de la población brasileña y el resto del mundo", afirma Jim Leape, Director General de WWF Internacional.

Cientos de miles de seguidores de WWF y Greenpeace han lanzado una campaña de movilización a través de sus redes sociales utilizando #SOSBrazil y #VetaTudoDilma en Twitter y posteando de forma directa en la página de Facebook del partido de presidente. Este jueves, incluso, activistas de Greenpeace escribieron "Nuevo Código Forestal, Veto Dilma" sobre las torres de la sede del Parlamento en Brasilia con letras verdes luminosas dibujadas con láser para llamar la atención sobre las consecuencias que podría tener la ejecución de esta ley.

Hasta ahora, más de 1,6 millones de personas de todo el mundo han firmado la petición de Avaaz para exigir a la presidente Rousseff el veto al Código Forestal.

Todos ellos han alertado de que el Código Forestal favorecerá la extensión de los cultivos agrícolas en áreas hasta ahora protegidas, y con la consiguiente degradación del suelo. Las organizaciones afirman que sólo un veto total a esta ley podría salvar los bosques brasileños y el clima mundial.

Además, la ley contempla una amplia "amnistía" para aquellos hacendados que, durante las últimas décadas y en contra de las leyes actuales, desforestaron donde estaba prohibido y mantienen en esas zonas una intensa actividad agropecuaria.

La Presidente no ha realizado ninguna declaración pública sobre cuál será su postura ante la ley aprobada por el Congreso. Dilma Rousseff recibió esta semana la actual versión y tiene de plazo hasta el próximo 25 de mayo para realizar un veto total o parcial de la ley o permitir que se promulgue.