La propuesta rusa para reformar la agricultura en Cuba no contempla la forma privada de propiedad de la tierra Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Martes, 29 de Agosto de 2023 12:37

Igual que hicieron con el tema de la digitalización del control fiscal y la banca electrónicaexpertos del Instituto de Economía del Crecimiento Stolypin (IER) enviaron propuestas al Gobierno cubano sobre el desarrollo de la agricultura en la Isla, informó a RIA Novosti Boris Titov, comisionado presidencial para la Protección de los Derechos de los Empresarios de Rusia y presidente del Consejo Empresarial Rusia-Cuba.

Una agromercado en La Habana.

Según recogió la agencia rusa de noticias PRIMA, "como parte del posible proyecto nacional 'Desarrollo del sector agrícola', se propone crear varias formas jurídicas de empresas agrícolas: de propiedad estatal, extranjeras (o de propiedad mixta, sobre la base de acuerdos de concesión), explotaciones privadas (que pueden combinarse en cooperativas), granjas privadas individuales o familiares que operan en parcelas de tierra privadas". La forma privada de propiedad de la tierra no está prevista

El objetivo de la reforma es aumentar la proporción de empresas agrícolas privadas con una reducción gradual de la proporción de empresas estatales o cuasi estatales. Los promotores de la llamada "cubastroika" dijeron que la forma privada de propiedad de la tierra no está prevista en el marco de la reforma.

"Se supone que el Estado arrendará la tierra a los agricultores: primero por diez años, después de este período, por 49 años, y luego el agricultor podrá reclamar un plazo de arrendamiento de 99 años", según la nota de prensa.

"El coste del alquiler de un terreno debe depender de la forma jurídica del arrendatario, la fertilidad del suelo y la ubicación del sitio. Durante los primeros cinco años, sin embargo, el alquiler debería ser simbólico: un peso por hectárea. Durante el proceso, el catastro de tierras agrícolas debería digitalizarse por completo y menos del 20% de todas las tierras agrícolas deberían transferirse a empresas privadas", recomendaron los expertos.

La venta de todas las tierras agrícolas, según el plan de los reformadores, debería concentrarse en un AgroBank especialmente creado y asignado por el Banco de Crédito y Comercio (Bandec), que concederá préstamos preferenciales a las empresas garantizadas por el derecho a arrendar terrenos.

"En caso de impago del préstamo, la tierra se retira del contrato de arrendamiento y se transfiere a otra empresa o agricultor. AgroBank también debería encargarse de proporcionar a la industria agrícola cubana equipos y productos químicos agrícolas", explican los autores.

"Como parte de la reforma, se invita a los inversores extranjeros a arrendar grandes extensiones de tierra, de al menos 10.000 hectáreas, para plantaciones de azúcar, plátanos, café, tabaco, etc. Y darles derecho tanto a la libre venta de productos en el mercado mundial como a la compra independiente de todo lo necesario para la importación. Al mismo tiempo, según el plan de los reformadores, los agricultores pueden adquirir parcelas de hasta 100 hectáreas", de acuerdo con la información de PRIME.

"Perturbadora"

Para el economista Pedro Monreal, "la propuesta agropecuaria del Instituto Stolypin parece perturbadora".

"La nota de prensa dice que se preparó con 'representantes de ministerios clave y del Banco Central de Cuba' y sería apropiado que funcionarios cubanos expliquen públicamente qué están pensando", consideró Monreal.

"Desde hace rato, la agricultura privada es crucial en Cuba y necesita una transformación modernizadora que la potencie. En ese sentido, la 'propuesta' rusa menciona medidas que ya han sido enunciadas antes:  empresa privada, crédito adecuado, más inversión e insumos, etc.", añadió.

"Probablemente sea la brevedad de la nota de prensa, pero la propuesta luce como el plan para una 'pelea de león contra mono amarrado': no privatización nacional de tierras, arrendamiento de 'al menos' 10.000 hectáreas para extranjeros, y máximo de 100 ha para el nacional", opinó.

El analista alertó de que "no solamente el 'proyecto nacional' de desarrollo agrícola excluye el traspaso de propiedad de tierra estatal al sector privado nacional, sino que sugiere un 'tope' al arrendamiento a empresas privadas nacionales: 'menos del 20% de todas las áreas agrícolas'".

"A falta de detalles, probablemente la parte más perniciosa de la propuesta rusa sea la prevalencia de criterios estrechamente financieros en la gestión agropecuaria, con sugerencia de retirar el arrendamiento de tierras por impago de créditos bancarios", dijo Monreal.

"La tierra (en propiedad o arrendada) no es simplemente un 'activo' financiero. Es la base de un modo de vida familiar y social, de cultura, seguridad alimentaria, y en Cuba es la principal fuente de empleo. Hay medidas posibles entre el impago y el retiro del arrendamiento", señaló.

"Parecería quedar claro que el tema del impago de créditos bancarios por parte de los agricultores nacionales no es una preocupación de los posibles inversionistas rusos, más preocupados por asegurar miles de hectáreas, 'vender libremente' e importar 'independientemente'", consideró.

Moscú se ha convertido en uno de los apoyos esenciales del régimen cubano. Financiamiento ruso impulsa numerosos proyectos prioritarios para el régimen. Las donaciones rusas van desde petróleo hasta alimentos y las autoridades de ese país aplazaron hasta 2027 el pago de una deuda de 2.300 millones de dólares más intereses.

Esta misma semana, Rusia concedió al Gobierno de Cuba otra prórroga hasta 2040 de los pagos de un préstamo para la construcción de una central eléctrica que nunca vio la luz, y sobre cuyo destino La Habana nunca ha rendido cuentas.

DIARIO DE CUBA