El arzobispo de Santiago de Cuba pide comida, corriente y libertad para el pueblo

El arzobispo de Santiago de Cuba, monseñor Dionisio García Ibáñez, reiteró este ...

Milei enfrenta a Maduro y le advirtió que la Argentina protegerá a los seis dirigentes perseguidos p

Javier Milei enfrenta a Nicolás Maduro por sus sistemáticas violaciones a los ...

Finalmente la Plataforma Unitaria de Maria Corina logró inscribir a un candidato para las presidenci

El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela informó este martes de la ...

Ataque terrorista islámico en Moscú: 115 muertos

Una ataque terrorista perpetrado por el Estado Islámico ocurrió este viernes en ...

Cuba pede ajuda ao Programa de Alimentação da ONU: o que isso diz sobre a economia do país

A situação econômica em Cuba está tão difícil que pela primeira vez o go...

¿Por qué hay tan pocas Amelias en Cuba? PDF Imprimir E-mail
Escrito por Indicado en la materia   
Martes, 14 de Junio de 2022 22:41

Amelia Calzadilla tras salir de la sede de Gobierno de El Cerro.

Por RAFAELA CRUZ.-

Amelia Calzadilla explotó de indignación. Ocho minutos le bastaron para dejar sin otro argumento que el acrílico de sus uñas a una dictadura totalitaria como la cubana, con 62 años de experiencia en la manipulación de masas.

El castrismo se desmorona. Es tan débil el régimen que no hay que "tumbarlo", bastaría con quitarle el apoyo. Sí, por más que como hijos de esta Isla nos avergüence reconocerlo, el castrismo no se cae porque muchos lo apoyan, muchísimos.

Pero ese apoyo no es suficiente para afirmar, como algunos hacen —me incluyo con remordimiento— que "los cubanos tienen lo que se merecen", pues aparte de reconocer el obvio respaldo que aún conserva la dictadura, hay que explicar cómo lo logra para saber si este pueblo es víctima o victimario.

"La arcilla fundamental de nuestra obra es la juventud". Esta frase del Che, que como cartel propagandístico empapeló paredes en los años 70 y 80, se hizo realidad del modo más siniestro: la primera obra de la Revolución fue convertir en arcilla la mente de varias generaciones de jóvenes cubanos.

Monopolizando la Educación, la Revolución se apropió, de facto, de la patria potestad. Los padres no podían transmitir a sus hijos sus valores políticos, religiosos, sociales, ni siquiera los estéticos eran válidos; solo la Revolución y su maquinaria de adoctrinamiento tenían esa potestad, llegando a implementar e imponer programas de ruptura familiar como las escuelas al campo y las becas a edades muy tempranas.

El objetivo fue crear una mentalidad tribal-comunitaria que suplantara la conciencia cívica y la iniciativa individual, incapacitando a las masas para generar análisis causales autónomos y críticos de la realidad, más allá del discurso simplista de la propaganda insidiosa y omnipresente que teñía todo de blanco y negro, bueno o malo, cubanos contra yanquis y sus deleznables gusanos apátridas.

Lo que no podía lograrse entre el matutino escolar y la 4:20PM, se conseguía con el monopolio de la información, distorsiones ideacionales que sembraran valores ético-ideológicos arcaicos beneficiosos para el régimen, que aceptaran e incluso justificaran la represión, cultivaran la veneración cuasireligiosa del líder, e inventaran y alimentaran una confrontativa agenda de política exterior numantina, basada en un retorcido nacionalismo y en un supuesto rol de actor importante en la escena internacional.

Un hipertrófico sector estatal, que en Cuba lo copó todo, hizo que cualquier ascenso social y mejoría de ingresos estuvieran determinados por la afiliación a estructuras políticas, administrativas o burocráticas piramidales, verticales, donde la fidelidad era el mérito supremo. Conocimiento, habilidades e iniciativa individual tenían un solo escenario para expresarse: el Estado.

Ese asfixiante sistema de destrucción del individuo que hizo de la patria una secta, colapsó a consecuencias de su insostenibilidad material; por ello, la casta intenta ahora un nuevo contrato social donde una naciente clase media-alta, conformista y de doble moral, consiente el autoritarismo a cambio de acceso a recursos que una vez centralizó el Estado y que, por la inviabilidad económica del castrismo de Fidel, hoy se están devolviendo —en uso aunque no en propiedad— a esa clase de nuevos privilegiados, para que los gestione de manera privada pero asociada a lo estatal.

El estrato social más bajo, constituyente de la masa social caracterizada por un nivel ético, educativo y material insuficiente para el pensamiento crítico, ovaciona a Díaz-Canel cuando aterriza con sus Mercedes en barrios marginales, periferias y arrabales. Es el grupo donde más caló la primitivización del comportamiento sociopolítico, la reducción de la conciencia crítica y la atrofia de la capacidad de posicionamiento individual. Por ello, se conforman con niveles míseros de seguridad y estabilidad a cambio de pasividad cívica y política. Panem et circenses.

La diferencia entre la clase baja y la media-alta es que, mientras esta última se apresta consciente a parasitar la Isla al ritmo que marque la casta gobernante, sacando pragmáticamente lo mejor de una situación que les supera, la clase baja está convencida, después de años de adoctrinamiento, de que está sentenciada a castrismo perpetuo, pues el costo de quitárselo de encima es impagable, más cuando, a 90 millas, está la opción de convertirse en mejor alimentada y vestida clase baja, con cadenas de oro y "especulación" en Cuba incluida.

Las mayores cicatrices de la Revolución no están en la geografía visible de la nación, ciudades arruinadas y campos desertizados que revelan seis décadas de involución; la verdadera putrefacción del totalitarismo está en la actitud soez, ordinaria, incívica, egoísta, antisocial, inmoral, hipócrita y agresiva del cubano común, cuyo vinculo más estable con sus semejantes es el maltrato y la suspicacia.

En conclusión, el pueblo cubano no tiene lo que se merece, es víctima, a veces consciente, a veces cobarde e incluso a veces masoquista, en una situación imposible de donde no ve salida y necesita para escapar, o mucha ayuda externa, o llegar a un grado casi suicida de desespero.

Amelia tuvo que llegar al desespero para explotar y protestar y, exceptuando a unos pocos valientes que se le han sumado y a otros muchos que ya están en mazmorras políticas, los cubanos seguimos en silencio. Eso es vergonzosamente cierto, pero los apagones, las tiendas en MLC y los tuits de la no-primera dama están metiéndole presión a la indignación popular. El 11J se acerca.

DIARIO DE CUBA

Última actualización el Lunes, 04 de Julio de 2022 20:57
 

Add comment


Security code
Refresh

El rescate ruso de Cuba se evapora

Indicado en la materia

Por EMILIO MORALES.- Mientras Cuba se apaga, las esperanzas sembradas por el PCC de un rescate financiero ruso a raíz del anuncio de que Cuba adoptaría el modelo ruso, se han desinflado a la...

Raúl Castro: el general en su derrota

Indicado en la materia

Por RAFAELA CRUZ.-  Si se mezcla cobardía patológica con nulidad intelectual se obtiene un Raúl Castro. Lo de este general con más estrellas en la charretera que tiros disparados en combate —s...

En Cuba sí que hay una crisis humanitari

Indicado en la materia

Por ROBERTO ÁLVAREZ QUIÑONES.-  ¿Cuál es la definición internacional de crisis humanitaria? Con total exactitud no hay ninguna. El consenso en Naciones Unidas y entre los expertos es que hay una crisis hu...

La “Revolución Cubana”, un bodrio carent

Indicado en la materia

Por Jorge Hernández Fonseca.-  Todo lo mal hecho se justifica en la Cuba de los hermanos Castro como siendo producto de lo que la dictadura llama “bloqueo imperialista” de los Estados Un...

La llamada “Revolución Cubana” fracasó

Indicado en la materia

Por Jorge Hernández Fonseca.-  No solamente la “Revolución Cubana” fracasó, como que es una verdadera vergüenza que hombres que tuvieron el coraje de alzarse en armas contra una dictadura política (si ...

Cuba: La isla de los sueños traicionados

Indicado en la materia

Por Jorge Hernández Fonseca.-  Existe en la Cuba castrista actual una decisión firme: cambiar su régimen económicamente socialista y estatista, a un régimen capitalista mafioso estilo ruso. Será capitalista porque se re...

Cuba y el capitalismo mafioso ruso

Indicado en la materia

Por Jorge Hernández Fonseca.-  Acaba de firmarse en la isla, entre un enviado directo de Putin y las autoridades castristas, un convenio para la implantación del experimento capitalista mafioso existente en Ru...