Con la presencia del vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence y del presidente interino venezolano, Juan Guaidó, el Grupo de Lima deliberará este lunes en Bogotá para repotenciar la ofensiva diplomática que pretende poner fuera del poder a Nicolás Maduro.

La cumbre de los principales países aliados de la oposición venezolana tendrá una nueva dimensión, tras los hechos del sábado marcados por la orden de Maduro de prender fuego a la ayuda humanitaria. El segundo hombre de la Casa Blanca (Pence) llegará a Bogotá invitado por el presidente Iván Duque para participar en la reunión extraordinaria del Grupo de Lima, bloque conformado por 14 países de la región que luchan diplomáticamente para lograr la caída de Maduro.

La asistencia de Guaidó, quien sigue en territorio colombiano, fue confirmada anoche por él mismo, desde la frontera.

Será la primera vez que los cancilleres de estos 14 países se reúnen Guaidó. Y será también la primera vez que el líder venezolano es recibido, como mandatario, por una alta autoridad de Washington.

Fueron los países del Grupo de Lima, con el liderazgo de Colombia y el apoyo de Washington, los primeros en reconocer la autoridad de Guaidó como mandatario interino y en desconocer la legitimidad de maduro tras asumir su nuevo periodo presidencial el pasado 10 de enero. Esa decisión de más 50 países de todos los continentes de reconocer la legitimidad de Guaidó ha significado el golpe diplomático más duro para Maduro.

Los países signatarios del Grupo de Lima han comenzado a adoptar sanciones políticas y económicas contra el régimen de Maduro y se cree que este lunes esa posición se endurecerá.

La agenda de la cumbre de este lunes, al parecer, comenzará por evaluar los hechos ocurridos ayer alrededor del frustrado ingreso de la ayuda humanitaria.

“El próximo lunes el Grupo de Lima se reunirá y discutirá sobre los hechos que hoy son claramente un sinónimo de reproche de la comunidad internacional por la barbarie de la violencia, y el Grupo de Lima también deliberará sobre cómo se debe arreciar ese cerco diplomático que propicie el final de la dictadura”, dijo este sábado el presidente Iván Duque, desde la frontera.

El atractivo principal del encuentro del lunes en Bogotá será la presencia de Pence y de Guaidó.

“Pence irá a Colombia para expresar el apoyo decidido de EE. UU. al gobierno interino de Juan Guaidó y a la lucha de los venezolanos por la democracia y contra la dictadura”, decía la declaración de Washington en que se anunciaba la visita y la decisión del funcionario de reunirse durante el viaje con familias que han tenido que huir del país y que se encuentran exiliadas.

La expectativa por la presencia de Pence en esta cita también gira alrededor de la posición que Washington alimentará tras los hechos de violencia de este sábado.

Washington se caracteriza por tener una posición más dura que las de los países que conforman el Grupo de Lima.

Mientras el Grupo de Lima se centra fundamentalmente en intensificar el cerdo diplomático para asfixiarlo políticamente, Washington sostiene que “todas las opciones están sobre la mesa”.

Maduro ha acusado sistemáticamente al gobierno del presidente Donald Trump, de preparar una “invasión militar”.

De hecho el sábado Maduro advirtió desde Caracas que esa podría ser una posibilidad.

Según con fuentes consultadas por este medio, la visita del vicepresidente se concretó durante la reunión que sostuvieron la semana pasada el presidente Iván Duque y Donald Trump, cuando el republicano le preguntó qué más podían hacer para fortalecer el cerco diplomático que han edificado en torno al régimen de Nicolás Maduro.

Dan Restrepo, exasesor de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental durante el gobierno de Barack Obama, cree que con el anuncio, Trump deja claro que está 100 por ciento jugado y dispuesto a hacer todo lo que esté a su alcance para presionar.

Este es el tercer viaje de Pence a Colombia, a propósito de la crisis venezolana, lo que da una dimensión de la importancia que Washington le está dando al problema y a Colombia como su principal aliado en la región.

EL TIEMPO; COLOMBIA/INTERNACIONAL