El régimen cubano se niega a negociar con el Gobierno de EEUU "bajo presión o amenaza", afirmó este lunes en Viena el canciller, Bruno Rodríguez Parrilla, en respuesta al cambio de política anunciado el pasado viernes por el presidente Donald Trump.

"Como establece la Constitución de la República de Cuba, jamás negociaremos bajo presión o amenaza", dijo Rodríguez en conferencia de prensa. El ministro subrayó que La Habana tampoco "realizará concesiones inherentes a su soberanía e independencia".

Catalogó la actitud de Trump de "descaro", al rodearse de los que volvió a llamar "terroristas", en referencia a quienes asistieron a la ceremonia en Miami, descrita por el canciller como un "grotesco espectáculo salido de la Guerra Fría".

"Protesto ante el Gobierno de EEUU por este descaro y lo emplazo a confirmar o desmentir si estos terroristas que he mencionado estuvieron al lado o no del presidente Trump", dijo.

"Es una ofensa que nuestro pueblo no podrá olvidar", agregó. "Fue indignante" ver al "público anexionista y plattista como coreaba USA USA", criticó.

El mandatario estadounidense firmó la cancelación de "los pactos de la Administración de su antecesor, Barack Obama, en un acto en el Teatro Manuel Artime de Miami, que lleva el nombre de un integrante de la Brigada 2506.

Asistieron los exprisioneros políticos Jorge Luis García Pérez (Antúnez), Ángel de Fana y Ángel Moya, los opositores Antonio Rodiles y Ailer González, residentes en la Isla, y Rosa María Payá, promotora de la iniciativa Cuba Decide, entre otros.

"Sin dudas la política del presidente Trump marca un retroceso en las relaciones bilaterales", añadió el canciller cubano, y anticipó que afectará la política exterior de Washington en general.

Rodríguez insistió en que este viraje provocará "daños y sufrimientos" al pueblo cubano, "daños económicos" a las empresas estatales y al naciente sector privado que se desarrolla bajo las tímidas reformas económicas, pero auguró que "no cumplirá los objetivos proclamados".

"Cuba rechaza enérgicamente las nuevas medidas que endurecen el bloqueo, lo que denunciaremos en la próxima Asamblea General de la ONU, porque es injusto, inhumano, genocida, extraterritorial y violatorio de la soberanía de todos los Estados", proclamó.

El régimen no entregará a prófugos de la justicia de EEUU

Con respecto a los fugitivos de la justicia norteamericana, Rodríguez Parrilla recordó que el régimen "ha concedido asilo político o refugio" a quienes consideró "luchadores por los derechos civiles".

"Por supuesto que estas personas no serán retornadas a los EEUU, que carece de base legal, política y moral para reclamarlos", insistió.

Trump en su discurso de este viernes reclamó la extradición de la prófuga estadounidense Joanne Chesimard, líder del Black Liberation Army, quien fuera condenada en 1977 por ocho cargos de asesinato, robo y agresión por la muerte del policía estatal Werner Foerster en 1973. Chesimard, según las autoridades de EEUU, se encuentra refugiada en la Isla.

Sin embargo, Bruno Rodríguez dijo que 12 ciudadanos estadounidenses que cometieron delitos en Cuba y fueron sancionados a prisión, han sido retornados a su país, una decisión que atribuyó a la "buena voluntad del Gobierno cubano".

Para el canciller, un presidente "nuevamente mal asesorado, tomó decisiones que solo benefician a intereses mezquinos y a un puñado de políticos". Rodríguez consideró "infantil" creer que la nueva política "pueda separar al pueblo de las FAR y del Ministerio del Interior".

"Al contrario, estas medidas refuerzan nuestro patriotismo, nuestra dignidad, nuestra decisión de defender nuestra soberanía", manifestó.